Tras pasar unas semanas en Acapulco, México, Feliciano López y su familia han hecho las maletas para volver a Madrid, aunque por poco tiempo. El tenista había terminado un torneo al otro lado del Atlántico, pero nada más regresar ha vuelto a viajar, aunque en esta ocasión mucho menos lejos, porque ha ido a Marbella.
El tenista ha comenzado a jugar el torneo AnyTech365 Andalucía Open de la ATP, un torneo que su mujer tampoco ha querido perderse y por eso se ha llevado al mejor acompañante posible, su hijo Darío que está hecho todo un viajero. Para él fue su primer viaje internacional el que hizo junto a sus papás a México, y ahora continúa sin separarse de ellos, puesto que el pequeño se ha convertido en la máxima prioridad del tenista y la modelo.
Sandra Gago ha sido vista disfrutando del partido con su bebé en brazos bien protegido del sol con un gorrito y también con una sombrilla de mano. A pesar de la apretada agenda del jugador de tenis, sigue disfrutando de los primeros meses de su hijo sin perderse prácticamente ningún instante. Cada vez que tienen ratitos libres hacen planes familiares, compartiendo esta etapa tan dulce y especial.
Fue el padre del tenista quienes les esperó en el aeropuerto de Madrid para trasladarles hasta su domicilio, pero poco después pusieron rumbo a la ciudad marbellí. Tras su derrota contra el serbio Miomir Kecmanovic, Feliciano López que eliminado de la competición en México, por lo que pudo aprovechar para disfrutar de unos días de tranquilidad y para visitar a algunas amistades, entre ellas la familia Espinosa Quintanilla.
El matrimonio formado por el empresario mexicano Manuel Espinosa y la modelo y actriz Mariana Quintanilla son amigos del tenista y la modelo española y por eso quedaron con motivo de su viaje. "Os esperamos en España para mimaros tanto como habéis hecho vosotros", compartía Sandra Gago en señal de agradecimiento en su cuenta de Instagram por la hospitalidad de sus anfitriones.
Compartiendo todos los momentos que pueden
Está claro que ella y su hijo Darío son una parte muy importante en la vida del tenista, y a pesar de sus compromisos profesionales procura pasar con ellos el máximo tiempo posible, por eso a Sandra Gago no le importa hacer las maletas y relajarse en los lugares que su marido visita por su trabajo. Su actitud al formar una familia recuerda mucho a la que adoptaron sus también amigos Fernando Verdasco y Ana Boyer, que siempre que han podido han viajado en familia acompañado por su hijo Miguel. Ahora que han vuelto a ser papás el ajetreo será mayor, pero seguro que lo siguen compaginando como buenamente puedan.