Rocío Carrasco y Antonio David Flores llevan bastante tiempo como el perro y el gato, pero ahora las medidas legales se han interpuesto entre ellos.
Antonio David Flores y su mujer Olga ofrecieron una extrevista a la revista Semana donde revelaron algunos detalles íntimos sobre la relación entre la hija del primero, Rocío Flores, y su madre Rocío Carrasco, con quien no se habla desde hace bastante tiempo.
Parece que para Rocío Carrasco no tendría la más mínima importancia no tener relación con su hija mayor, y es que desde hace cuatro años no sabe absolutamente nada de ella ni se habría molestado en llamar a la casa de su exmarido para preguntarle qué tal está. Ahora su hijo, que muy pronto cumplirá la mayoría de edad, está esperando para irse él también a vivir con su padre y la mujer de este. Hasta el momento parecía que no le estaba importando, es más, estaba feliz y pletórica por su compromiso y próxima boda con su novio Fidel Albiac, o eso es lo le han echado en cara Antonio David y Olga. Rocío Carrasco toma medidas legales
El matrimonio ha revelado datos como que Carrasco un día le dijo a su hija "no soy tu madre", y colgó el teléfono, o "llorarás lágrimas de sangre" cuando quiso defender a su padre Antonio David Flores. La esposa de Flores, Olga, añadió: "Para los hijos de mi marido no soy madre, sino su salvación".
Y por lo que se ve todo esto no ha sido para nada plato de buen gusto para Rocío Carrasco. Su respuesta ha sido interponer una demanda a su exmarido por sus declaraciones. Rocío Carrasco se ha hartado y ha tomado cartas en el asunto. Parece que muy pronto se verán las caras en los tribunales.