El actor ha pagado con su chófer el enfado porque el proceso judicial con su mujer haya dado el salto a la prensa tras intentar mantenerlo en secreto.
Robert de Niro se divorció en noviembre de 2018 de Grace Hightower, la que fue su mujer durante más de 20 años. Actualmente ambos se encuentran en una lucha por la custodia de la hija de siete años que tienen en común, Helen Grace De Niro.
Parece que el actor no está llevando nada bien toda esta situación y así lo demostró con su comportamiento tras el último juicio que tuvo con su exmujer. Nada más salir del juzgado de Manhattan en el que se llevó a cabo el juicio, Robert De Niro estalló al no ver a su chófer esperándole en la puerta. "¿Dónde estás? ¡No estás en frente! ¡No estás donde nos dejaste, si estuvieras verías a todos los fotógrafos aquí!" gritaba el actor a su chófer quien se había confundido de dirección.
Pero el verdadero motivo del enfado del actor no era realmente este, si no el hecho de la presencia de los fotógrafos que significaban que el proceso judicial había dado el salto a la prensa. El enfado de Robert de Niro se debe a que el actor quería que el proceso judicial se llevara en secreto, por ese motivo explotó al toparse con una multitud de periodistas a su salida y sin un coche con el que evitar las fotografías y preguntas. "¡Esto es ridículo!"
El actor ante la ausencia de su chófer decidió taparse la cara con un periódico mientras gritaba y buscaba al coche. Ante el espectáculo que estaba montando Robert De Niro en plena calle, su abogado le hizo entrar de nuevo en los juzgados para esperar a que llegara el chófer, lejos de clamarse Robert De Niro volvió a manifestar su incesante malestar ante la atenta mirada de todos los allí presentes: "¡Esto es ridículo!".