No se sabe si los motivos su estado anímico tienen algo que ver con la salud, pero el hombre de negocios se mantiene callado la mayor parte del tiempo, sin decir qué es lo que realmente le ocurre. El poco contacto que mantiene es con sus familiares más cercanos, su madre y sus hermanas, sin mostrar el interés por socializar con otras personas.
Dentro de este bucle de tristeza, hay algo que aún logra sacarle la sonrisa: su hija Dream Kardashian. El padre se preocupa únicamente por su hija y se está volcando en su cuidado y educación en esta etapa en la que está de bajos ánimos. Pasar tiempo con ella es una de las cosas que más le gusta, pero, al parecer, no hay nada más que le entusiasme.
Una enfermedad, el principal motivo
La estrella de televisión sufre desde el año 2014 diabetes de tipo dos, enfermedad que le diagnosticaron oficialmente y por la que le hospitalizaron el mismo año. Antes de esto, ya venía mostrando públicamente su preocupación por el peso, por lo que decidió ponerse en manos de un profesional de la alimentación. Sin embargo, ni un nutricionista , ni un entrenador personal, han logrado que el hermano pequeño de Kim Kardashian lograra superar su alimentación a base de comida basura.