Cabe en el vestido pese a los años que han pasado
Parece increíble, pero es cierto. La puertorriqueña apostó por el diseño filipino con cuerpo en terciopelo negro y falda con flores doradas que lució 66 años atrás, con la salvedad de que entonces no llevaba escote, y en la gala de 2018 sí. Añadió también un cinta negra, guantes largos y cuello dorado.
Siempre simpática y dicharachera, comentó ante los medios de comunicación presentes lo emocionada que estaba por caber en el mismo vestido que llevó cuando tenía 30 años, algo que no todo el mundo sería capaz de hacer: "No me lo creo. Aún quepo en él, Dios mío". Además, el conjunto estaba perfecto, por lo que está claro que lo ha guardado con mucho mimo durante todos estos años.