El Rey Juan Carlos ha estado disfrutando al máximo de su visita a España. Cada vez viaja con más asiduidad a su país y en esta ocasión ha aprovechado para salir a comer en uno de los mejores restaurantes de la zona de O Grove. Como suele hacer cuando está en Galicia, ha estado acompañado por su gran amigo Pedro Campos, y con él ha sido visto disfrutando de la gastronomía de la zona.
A la salida de dicho local, el Rey Emérito ha sido fotografiado mientras llevaba su bastón e iba con una de las personas de su confianza. Un poco por detrás iba uno de los trabajadores del Rey Juan Carlos, y llama la atención que fuese cargado con tuppers en una bolsa blanca. Este detalle no ha pasado desapercibido, por lo que se intuye que ha sobrado algo de comida que no han querido desperdiciar.
Nadie se hubiese imaginado que el padre del Rey Felipe, lejos de tirar la comida, se la fuese a llevar para consumirla en otro momento. Y es él también es humano y quizás no le guste desperdiciar más de la cuenta, por lo que llevarse las 'sobras' de esta comida no ha sido un impedimento para él, pese a que además ha sido visto haciéndolo.
Poco antes de subirse al coche ha saludado a los periodistas que se encontraban presentes, y él se ha mostrado feliz, algo que se aprecia en cada una de sus visitas A España. Poco antes de quedarse una vez más en Galicia tuvo un encuentro con su hijo en Vitoria, donde Felipe VI aterrizó para ver a su padre. El Emérito viajó en jet privado desde Ginebra para acudir a una cita médica y tuvieron así un encuentro de lo más casual e inesperado que duró pocos minutos.
Comida y regatas
Después de que el Rey Juan Carlos acudiera a la revisión médica, puso rumbo a Vigo para instalarse otra vez en la casa de Pedro Campos. Está programado que disfrute en Sansenxo de las próximas regatas, una de sus grandes aficiones, pero antes no ha desaprovechado la oportunidad de disfrutar del marisco de la zona.