Galería: Tanatorio de Mario Biondo
Raquel Sánchez Silva ha pedido que no se especule sobre la muerte de su marido, Mario Biondo, de 36 años, cuyo cuerpo sin vida apareció el pasado jueves en el domicilio madrileño que compartía con su mujer.
La presentadora también ha desmentido que se trate de un suicidio, tal y como se ha señalado a partir de las informaciones de la policía. "Desde el dolor más profundo que se pueda sentir quiero daros las gracias a todos por vuestro amor y cariño. Habéis sido y sois un gran apoyo. Mario era un hombre feliz y estábamos profundamente enamorados. Las investigaciones siguen su curso y os rogaría que no sacaseis conclusiones precipitadas. Mario quería vivir y no se quitó la vida. Todo apunta a un desgraciado accidente. Os ruego prudencia y respeto por la memoria de mi marido y el dolor de todos los que le amamos.
Según relata La Otra Crónica de El Mundo, Mario Biondo habría aparecido ahorcado con un pañuelo palestino en la estantería del salón, que tiene casi dos metros y medio de alto. La asistenta encontró al fallecido a las 17:00 horas, sin embargo el forense fechó la hora de la muerte a las 06:00 horas.
Pequeñas diferencias sentimentales
Esta publicación señala que se tomó declaración a Sánchez Silva y a la empleada, y que la presentadora habría confesado que habían tenido alguna diferencia sentimental en los últimos días. Asimismo, no se encontró ningún tipo de droga o pastilla. En un primer informe de la autopsia se ha averiguado que el cámara italiano falleció por asfixia.
La desconsolada Raquel Sánchez Silva se encuentra apoyada por su familia y amigos, así como por los padres de Mario Biondo, rotos de dolor por la repentina muerte de su hijo. Estos últimos han decidido que llevarán los restos de su vástago a su Sicilia natal.