La Reina Letizia se desplazó a Vitoria para presidir la entrega de la Enseña Nacional a la 11ª Zona de la Guardia Civil. Allí, Doña Letizia ha vuelto a sorprender por su atuendo, y no solo porque fuera más o menos favorecida, sino por lo que implica cómo ha ido a un acto tan tradicional que tiene un vestuario concreto.
Habitualmente, cuando una mujer de la Familia Real participa en un solemne acto de estas características, tomaba como atuendo un vestido negro con peineta y mantilla, accesorios típicos y tradicionales en España. Así lo han hecho la Reina Sofía, la Infanta Elena y la Infanta Cristina cuando les tocó, y también Doña Letizia cuando era Princesa de Asturias.
Para romper el protocolo y darle un nuevo aire a la Casa Real, o eso parece, la Reina renunció a ir vestida de esa guisa y optó por ponerse el traje que llevó en uno de los días más importantes de su vida, el que lució el 19 de junio de 2014 en la proclamación de Don Felipe como Rey de España.
Letizia, 10 años después
Así, Doña Letizia llevó un Felipe Valera en blanco roto decorado con aplicaciones de critales rubí, ámbar y rosa talco con microperlas en la parte del cuello. Como complemento escogió unos salones de Magrit, su firma favorita de calzado. Solemne en la ceremonia y mostrando respeto por la Guardia Civil, se mostró más relajada cuando saludó cariñosamente a una niña pequeña que se acercó con su madre.
"Han pasado casi diez años desde que amadriné, como Princesa de Asturias, la entrega de la Bandera de la Unidad de Acción Rural de la Guardia Civil a vuestros compañeros de Logroño. Hoy, como Reina, tengo de nuevo el privilegio de entregar la Enseña Nacional a la décimo primera Zona de la Guardia Civil, ubicada en el País Vasco", explicó la Reina en su discurso, que recordó al Rey y a las víctimas del Terrorismo.