Los padres de la víctima iban a testificar con el fin de demostrar que su hijo era su único sustento económico.
Cada vez falta menos para que dé comienzo el juicio contra Daniel Sancho en Tailandia después de haber asesinado presuntamente a Edwin Arrieta en agosto de 2023 y poco a poco se van conociendo más datos sobre cómo será el proceso. Mientras que el juicio dará comienzo el 9 de abril de 2024, se prevé que se alargue hasta el mes siguiente porque declararán bastantes testigos.
En un primer momento se dijo que habría más de 50 personas para testificar sobre los hechos, pero ahora la lista se ha visto muy reducida. Por otro lado, se ha podido conocer que los únicos dos testigos que iban a declarar por parte de la acusación han sido denegados por parte la Corte provincial de Koh Samui. Esas dos personas son los padres de la víctima, Leobaldo Arrieta y Marcela Arteaga, y con su declaración se pretendía demostrar que Edwin Arrieta era el único sustento económico que tenía la familia, que ahora se encuentra en un mal momento. "Cuando se daba por hecha su comparecencia en el juicio a través de videoconferencia -son personas mayores y no pueden desplazarse desde Colombia a Tailandia-, la Corte de Koh Samui ha decidido en una reciente resolución judicial denegar sus testimonios", apuntan desde el medio Infoabe España.
El motivo por el que se ha rechazado por parte de la corte que testifiquen es porque no cuentan con medios técnicos para que lleven a cabo la declaración. Otro inconveniente sería la diferencia horaria entre ambos países, ya que ellos están en Colombia y el juicio es en Tailandia. Pese a que no puedan declarar, les han dado una alternativa, y es que la familia de Edwin Arrieta acredite mediante un documento que él era el único sustento de sus padres. El mismo medio ha indicado que también les han dado la posibilidad de que testifique otra persona en su nombre. En marzo de 2024 los abogados de la familia ya indicaron que habían hecho todo lo posible para que pudieran testificar a través de la Embajada, el Consulado o mediante algún medio telemático. "Nos encontramos con personas que tienen una edad ya muy avanzada. Ni siquiera tenían visa, tampoco tenían pasaporte y nos está costando mucho que ellos puedan ser trasladados hasta allí. Sobre todo también por lo largo que puede ser el viaje y por las circunstancias, evidentemente que ellos tienen sobre cómo están sobrellevando esta situación", comentó la defensa de la familia de Arrieta.
Quieren justicia por encima de todo
Por otro lado, han querido recalcar que el juicio no es para solicitar una indemnización económica, sino para hacer justicia: "Queremos también dejar claro que esta parte va a ejercitar la acción civil, pero que esto no es un pleito en el que queramos una indemnización, sino que la ley tailandesa lo que prevé es que se pueda ejercitar esta acción. Y así lo haremos. Pero creo que no hay dinero y en esto tenemos que estar todos de acuerdo, que devuelva a una madre a su hijo o que nos pueda devolver a un familiar que ha sido perdido en estas circunstancias".