Raquel Mosquera no atraviesa su mejor momento. La viuda de Pedro Carrasco acumula deudas por importes prácticamente inasumibles. A su grave situación financiera, se suma su ingreso hospitalario por una crisis de la enfermedad mental que padece, bipolaridad.
El pasado 26 de abril de 2021, Raquel Mosquera recibía el alta hospitalaria tras permanecer ingresada durante dos semanas por un brote psicótico que, supuestamente, le sobrevino por la intensa presión a la que estuvo sometida al revivirse los episodios finales de su relación con el que fue su marido y que Rocío Carrasco estuvo detallando en la docuserie 'Rocío, contar la verdad para seguir viva'. Como consecuencia, la peluquera sufría una recaída de la enfermedad contra la que lucha.
Al borde de la quiebra
A todo esto se une que según Lecturas, Raquel Mosquera podría estar próxima a la ruina. Solo tres meses después de contraer matrimonio, la pareja dio de alta la empresa 'Carrasco y Mosquera SL' para la explotación de peluquerías y salones de belleza y estética, compañía con la que se quedó Raquel Mosquera tras la muerte de Pedro Carrasco y con la que también tiene problemas.
Asimismo, en el año 2018, a su salida de 'Supervivientes', Raquel abrió un nuevo negocio con su actual marido, Isi, una cafetería situada en Móstoles. Además gestiona dos negocios en un centro comercial de las Rozas y una tienda de ropa, de los que se ocupa personalmente. Sin embargo, al parecer, los negocios de la peluquera no funcionan nada bien y están en números rojos desde antes de la pandemia. Lo que empezó como una mala racha ahora se ha instaurado como una tendencia negativa que podría culminar en la quiebra económica.
Por otro lado, sobre el chalé que Raquel Mosquera adquirió en 2002 pesan dos embargos administrativos desde 2016. Uno a favor de Hacienda para responder por 5.111,42 euros y otro de 2021, probablemente el que la ha empujado a vender su casa de Galapagar en Madrid.