Galería: Boda de Rafa Nadal y Xisca Perelló
¡Por fin llegó el día! Tras quince años de noviazgo, Rafa Nadal y su novia Maria Francisca Perelló, cariñosamente apodada Xisca aunque ahora prefiere que le llamen Mery, han pasado por el altar y se han dado el 'sí, quiero' delante de unos invitados de gran categoría ansiosos por ver cómo esta pareja 'de toda la vida' se unía finalmente en santo matrimonio. La expectación, como estaba previsto, era muy grande a pesar de que el ahora matrimonio siempre se ha mostrado de lo más discreto en lo que al foco mediático se refiere.
La boda ha tenido lugar el día 19 de octubre de 2019 en Sa Fortalesa, un castillo del siglo XVII situado en la zona de Pollença, una localidad mallorquina. A pesar del secretismo que existe en torno a esta ceremonia religiosa, sí se han podido saber algunos detalles sobre cómo ha sido uno de los días más felices de la pareja. Para empezar, el castillo donde se ha celebrado en en realidad una finca blindada a la que se puede acceder por tierra, mar o aire, como se tenía previsto que aterrizase uno de los invitados más especiales, el Rey Emérito Juan Carlos, aunque finalmente se le pudo ver en un coche gris accediendo por la base militar. Según desvelaba El Periódico, alquilar la fortaleza un día costaría en torno a 40.000 euros. Eso sí, el lugar incluye vistas al mar, enormes jardines y muchas construcciones que explorar. De hecho, fue aquí donde se casó el futbolista Gareth Bale, que organizó un evento de tres días.
Unos invitados de alta categoría
Los invitados al enlace fueron uno de los puntos más llamativos de esta boda, ya que unas 500 personas fueron las que acudieron a celebrar el día con los novios. Entre ellas, grandes amigos de la pareja como Feliciano López y su reciente mujer Sandra Gago; Carlos Moyá con Carolina Cerezuela; o Marc López, un íntimo amigo del tenista. Respecto a sus familiares no podía faltar la hermana del tenista, que fue quien presentó a la pareja, y los padres de ambos, muy ilusionados con el enlace. También acudieron el agente, el doctor y el técnico de la Academia de tenis de Rafa Nadal, personas muy cercanas al mallorquín en su día a día.
Pero, sin duda, los invitados más especiales han sido el Reyes Eméritos, don Juan Carlos, a quien la pareja invitó personalmente en julio de 2019 cuando el Rey visitó la academia del tenista junto a su esposa. Todos los invitados llegaron a la fortaleza en autobús, exceptuando el Rey Juan Carlos y el tenista Carlos Moyá, que lo hicieron en coche. Con el paso de los días se irán desvelando quiénes acudieron realmente al enlace, ya que no se ha querido filtrar demasiado para respetar la intimidad del matrimonio, que quería celebrar así su día especial.
La novia, de Rosa Clará, el novio, de Brunello Cucinelli
De hecho, todos los invitados encontraron en el asiento de los autobuses que les trasladaron desde Manacor hasta Pollença una nota con el siguiente mensaje del matrimonio: "Os recordamos que nos gustaría que disfrutarais de nuestra boda y que fuera en la más estricta intimidad. Cuando lleguéis encontraréis un casillero para que podéis dejar los móviles. Muchas gracias: Maria Francisca y Rafael", algo que evidencia sus deseos de privacidad.
Respecto a los trajes, Rosa Clará fue quien eligió la novia para su vestido, con un diseño elegante y sofisticado. Además, la modista también vistió a la madre de Xisca, la madre de Rafa Nadal y a su hermana, refiriéndose a ellas como "una familia extraordinaria". Por otra parte, el tenista se vistió de la firma italiana Brunello Cucinelli. Además, todos los testigos del novio lucieron la misma pajarita de color lila, un especial detalle que desvela una pequeña parte de la boda. La ceremonia fue oficiada por el sacerdote Tomeo Catalá, amigo íntimo de la familia y fundador de 'Proyecte Home'. Para poder casarse en la fortaleza, los jóvenes tuvieron que pedir permiso al obispo Sebastián Taltavull, quien dio el visto bueno.
La ceremonia comenzó con retraso, pero sin duda fue un día de lo más especial para los novios, quienes lo celebraron por todo lo alto para hacer honor a esos quince años juntos y para contentar a sus invitados, que respetaron las normas del enlace y disfrutaron con el reciente matrimonio. Sin duda, esta boda era de las más esperadas de 2019 por los medios debido a la gran expectación y a la sencillez que siempre han demostrado ambos. ¡ Que vivan los novios !