El restaurante y lounge bar, Capuccino, ha abierto sus puertas en La Moraleja de Madrid. Propiedad del Marqués de Cubas, el aristócrata organizó un gran evento para dar la bienvenida al nuevo bar que aspira a convertirse a uno de los lugares de moda.
Su tío y dueño del local se fundió en un abrazo con Tamara cuando se saludaron, demostrando que los Falcó son una familia bien avenida. Previamente, el Marqués de Cubas había comentado que aunque desconoce la relación que mantiene con Enrique Solís, le encantaría ver a su sobrina enamorada y feliz.
Una noche complicada para los Falcó
Aunque Tamara Falcó pasó una buena noche, el gesto le cambió cuando vio a la prensa, que quiso acercarse a hablar con ella. La hija de Isabel Preysler o no estaba de humor o no quería contar nada, y salió corriendo despavorida en cuanto vio a los periodistas.
La fiesta terminó peor, ya que la Policía se personó en el local. Según Gtres la causa fue por el exceso de invitados, mientras que Vanitatis apunta a que los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad se presentaron debido a las denuncias de los vecinos, que se quejaron del exceso de ruido que provocaba en su inauguración.