Han sido muchas las versiones que se han dado sobre la situación pero las investigaciones sobre su muerte continúan. Liam Payne había consumido grandes cantidades de drogas y alcohol, algo que se conoce debido a la autopsia que se le practicó. Sin embargo, se descartó desde un primer momento el suicidio, motivo por el que se ha investigado a las personas que pasaron con él sus últimos instantes de vida.
Roger Nores, quien fuera su amigo y representante, ha sido imputado por la Fiscalía, así como otras dos personas, un trabajador del hotel y quien supuestamente le suministró la droga. Pues bien, ahora se sabe que la Policía está investigado a otro trabajador del hotel, concretamente a quien captaron las cámaras de seguridad llevando a Liam Payne minutos antes de su muerte.
Una investigación compleja
Los interrogatorios se llevarán a cabo los días 17 y 19 de diciembre a través de videollamada y se desconoce cuáles son los cargos penales a los que podrían enfrentarse las personas investigadas. Sí que se sabe que los Fiscales estaban considerando presentar cargos por homicidio involuntario contra los empleados que fueron grabados mientras sacaban a Liam Payne del vestíbulo poco antes de que se precipitara por el balcón.