Un interés común: sus hijos
Sin embargo, y a pesar de todos los problemas que la pareja tenga, lo más importante para los dos son los pequeños que tienen en común, fruto de sus más de diez años juntos. Tras unas duras negociaciones, que se extendieron por meses, para llegar a un acuerdo por la custodia de los dos niños, así como del lugar en el que residirían definitivamente, la pareja ahora ha comenzado a llevar su vida a cabo por separado, con la división de la custodia de los dos pequeños. Mientras que, una vez se muden a Miami, los niños tendrán que pasar de 10 a 15 días junto a su padre, que viajará hasta el país estadounidense para estar con ellos, la cantante podrá tener la custodia de sus hijos el resto del mes.
Este enorme cambio en sus vidas puede pasar factura a dos niños tan pequeños, por eso el matrimonio ha comenzado a ser más cuidadoso de su intimidad en lo que a sus hijos se refiere, en un intento de que les afecten lo menos posible sus problemas. Así, Piqué se ha mostrado muy atento y cariñoso con sus dos niños, dedicándoles todo su tiempo. Su paseo en coche ha tenido lugar solo unos días después de la publicación de unas fotografías del exfutoblista en París, donde acudió a una cena con amigos, en las que se lo veía muy serio y sombrío, una imagen que muy lejos queda de la que ha intentado dar frente a las cámaras.
Parece ser que todos los problemas que asolan su vida empiezan a pasar factura a Gerard Piqué, por eso ha decidido centrarse en sus hijos y superar esta etapa tan complicada. Una vez los dos niños se muden a Miami con su madre, el futbolista tendrá que coger un avión cada vez que quiera verlos, por lo que aprovecha ahora para pasar el mayor tiempo que pueda con ellos y disfrutar juntos de la ciudad en la que han crecido.