"Debemos luchar por una investigación en los canales de Youtube donde los padres se lucran de vender la vida de sus hijos exponiéndolos a todo tipo de peligro físico y psicológico", se explica en la campaña. Además, la recogida de firmas está teniendo bastante éxito, en apenas unas horas cosechó casi 500 firmas que aportaron su granito de acera para que los menores salgan por completo del negocio cibernético que llevan a cabo sus padres.
Desde la petición impulsada en Change.org, se sostiene la idea de que los niños no desean en realidad aparecer en esos vídeos con lo que se logra una gran repercusión: "Son canales donde podemos ver a niños desde el embarazo, pasando por el parto hasta su crecimiento en todo tipo de situaciones. Como, por ejemplo, niños desnudos en la bañera, cambiándoles pañales, enfermos, donde a los padres les importa más grabarlo que los propios niños".
Su hijo mayor se hace Youtuber
Además, no es lo único que critica desde la petición que se ha iniciado en la plataforma de recogida de firmas, ya que hace unos meses el hijo mayor de Verdeliss, Aimar, también se convirtió en youtube: "Hay constancia que en estos canales la mayoría de visitas son de pedofilos, gente que siente atracción sexual en ver parir a las mujeres, bañar a un bebé, etc. Los padres (dueños de estos canales) son conscientes de ellos ya que sus vídeos figuran en numerosas listas de reproducción de gente pedofila donde podemos ver todo tipo de comentarios sexuales hacia los niños", explican desde la petición.