El pasado domingo 22 de agosto se cumplía el peor de los presagios para Isabel Preysler: Su madre moría a los 98 años. Los médicos habían confirmado ya que esto podría ocurrir de un momento a otro, motivo por el cual toda la familia se acercó hasta la casa de la socialité para darle el último adiós y pasar con ella los que serían sus últimos momentos de vida.
Tras esto, el pasado lunes 23 de agosto se celebraba la misa funeral en la misma residencia del conocido barrio de la Puerta del Hierro, en Madrid. Hasta allí desplazó el Padre Ángel, amigo de la familia, oficiar una íntima ceremonia y dar el último adiós a la Beatriz Arrastia Pérez de Tagle. "Éramos muy pocos", reconocía el también fundador de Mensajes de la Paz para Vanitatis: " Isabel quiso que fuera una celebración muy íntima, muy discreta, como había sido su vida. Días antes ya había recibido el sacramento de la extremaunción y lo que hice fue transmitir a sus familiares el amor de Dios hacia todos ellos".
Misa oficiada por el Padre Ángel
Sin duda la más afectada por la pérdida es, por supuesto, Isabel Preysler: " Está muy triste, con mucha congoja y, aunque sabía que el final era el que ha sido, no quita el sentirse huérfana. Estaba muy unida a Betty, que así la llamábamos familiarmente los que la hemos conocido".
Tal y como reconoció el Padre Ángel, Tamara Falcó tampoco tenía consuelo tras la muerte de su abuela: " Estaba muy triste, pero su fe le ayudará en estos momentos ". Esa tristeza se pudo apreciar en su rostro a la salida de la casa de Isabel Preylser. La televisiva salía sola y conduciendo su propio coche. A pesar de que Beatri Arrastia tenía muchos nietos, tal y como ella misma confesó en su única entrevista en televisión en 'Volverte a ver', Tamara Falcó era especial: "Es lo mejorcito de la familia", reconocía.
En el último adiós a Beatriz Arrastia Isabel Preysler no estaba sola. Además de la evidente compañía de Mario Vargas Llosa y su hija Tamara Falcó, también se encontraban allí los hijos de su hermana Beatriz y su hijo Enrique Iglesias, que viajó desde Miami para darle el último adiós a su abuela. Sus otros hijos, Chábeli y Julio José llegarán pronto a Madrid ya que la inmediatez de los sucedido les impidió llegar a tiempo.