Galería: Boda de Pelayo Díaz y Andy McDougall
Casi con el 'sí, quiero' aún en la boca, los flamantes marido y marido, Pelayo Díaz y Andy McDougall, aparecieron en la alfombra roja de los premios Vanity Fair 2018. Por supuesto, como dos niños con zapatos nuevos, no pudieron evitar presumir de su alianzas en el momento de posar ante los fotógrafos. Y aunque han tenido que aplazar uno de los pasos importantes de una boda como es la luna de miel por motivo de la vuelta al a trabajo -"Ni luna de miel ni nada, ahora hay que dedicarse a trabajar", decía el estilista- si que se han fijado un nuevo objetivo: formar una familia.
Con los papeles firmados y el nidito de amor instalado (la pareja se compró un piso de 147 metros cuadrados en pleno centro de Madrid hace unos meses), Díaz y McDougall tienen claro que entre aquellas paredes no sólo serán dos si no que esperan que pronto haya algún que otro retoño correteando por allí: " Dentro de poco ya los hijos ", bromeaba el estilista. Pero entre broma y broma, la verdad asoma: " Sí, si nos gustaría. Yo lo clarísimo ", aseguraba. El argentino titubeó un poco más sobre este tema: " No me asustes ", le decía a su ya marido.
Pero para el estilista parece que está muy claro. El hecho de tener descendencia era algo que ya rondaba por su cabeza antes incluso de que Andy McDougall llegase a su vida: " El año que conocí a Andy, cuando hice la Interviú, mi máximo interés era ser padre ", aseguraba. Pero la vida hizo que a esos planes se uniese el que sería el amor de su vida y el segundo padre de sus hijos. Así que ahora es cuestión de tiempo esperar a que llegue la feliz noticia de que los Pelandy -así se hace llamar el nuevo matrimonio a modo hashtag en sus redes sociales- van a ser papás.
McDougall: "Ahora lo tengo claro"
Y con la sortija ya puesta, el argentino ha entrado de pleno en el mundo de Pelayo Díaz, que ahí es nada. Acostumbrado a ser el que está detrás de los influencers -como relaciones públicas de su propia agencia de representación-, ahora yendo de la mano de uno su vida privada se ha convertido en interés público, algo que él mismo asegura llevar estupendamente: " Lo conozco desde hace un año así que ahora lo tengo claro ", aseguró. Además también quiso confesar que fue lo que le enamoró del estilista en menos de un año: " Cada día es algo distinto, es algo diferente. No hay rutina ".