La británica exigió celebrar su boda en la misma iglesia de Davington en la que dio el último adiós a su madre Paula Yates, quien murió en el año 2000 a causa de la heroína. En la entrevista concedida a 'Hello!', la joven asegura que sentía la presencia de su madre mientras se casaba. ''Mi madre amaba las celebraciones familiares y ella adoraría a Tom y el hecho de que nos hayamos casado aquí'', dice Peaches.
La pareja decidió que su perro golden retriever llamado Parper fuera el responsable de acercarles los anillos de compromiso en el momento crucial. Otro detalle peculiar de la ceremonia fue la tarta de novios hecha de cerditos comestibles. No se podía pasar por alto esta pregunta en la entrevista, a lo que ella contestó: "Estoy obsesionada con los cerdos. Creo simplemente que son adorables, así que tenían que desempeñar un papel en la boda". Y agregó: "Me he casado con el hombre más maravilloso, que sé que me ama más allá de cualquier cosa, a través de todas mis faltas."
Astala Dylan cayó al suelo mientras le paseaba su madre
La familia estuvo reunida hasta la una de madrugada festejando la feliz pareja que forman los recién casados. Esta semana, Peaches ha sido muy criticada por su papel de madre al publicarse una imágenes en las que se cae al suelo el carrito de su hijo mientras ella habla por el móvil.
Sin embargo, la caída del pequeño, que acaba completamente revolcado por los suelos, no es motivo suficiente para que su madre cuelgue el teléfono. A pesar de las críticas, no hay nada que le estropee su estado de felicidad en la semana de su boda.