Galería: Paulina Rubio, la chica dorada
Ha pasado muchos años desde que Paulina Rubio y Nicolás Vallejo-Nágera, más conocido como Colate, hicieron oficial su separación. La cantante y el empresario se separaron en 2012, y aunque en ese momento hicieron saber que su divorcio sería amistoso, no cumplieron con su palabra, porque llevan nueve años de batalla judicial. Su relación fue larga, después de siete años como novios y cinco años casados. Tuvieron un hijo en común, y el niño ha sido el principal motivo de sus disputas.
Los dos se han tenido que ver la cara en los juzgados en más de una ocasión puesto que ambos quieren la custodia de Andrea Nicolás. Ahora que las cosas están más relajadas tras el frenazo de Colate, ha sido la cantante la que ha concedido una entrevista y ha hablado como nunca de su vida privada, sin obviar su mediático y controvertido divorcio con el español.
La artista mexicana ha presentado su último single y se encuentra de promoción, por eso ha hablado en una entrevista con Pati Chapoy, diciendo de su divorcio: "Yo creo que fue algo inevitable, prefería no estar con él a tener algo tan tóxico, sobre todo porque sentía que no era necesario".
Asimismo, ha dicho que durante su matrimonio las cosas no fueron bien y considera que por amor fue muy confiada: "En ese momento, mi mamá me decía: 'Tienes que hacer las cosas más organizadas', pero así salieron las cosas al principio". Lo cierto es que en las relaciones no le ha ido nada bien, porque poco después comenzó su relación con Gerardo Bazúa, padre de su segundo hijo, y las cosas con él tampoco terminaron bien.
"Oye sí, uno aprende, pero amor amor uno hace cosas que jamás haría normalmente", respondía. Y en vista de todo lo que ha vivido no le importaría enamorarse de nuevo, aunque asegura que no tiene ningún tipo de prisa, diciendo: " Estoy tan bien en mi piel en este momento. Para empezar, mis hijos, ellos son pasión y aventura, ellos necesitan mucho de mí, entonces, no me quiero distraer".
Sus hijos, su vida
"Ellos son mi prioridad. Cuando no estoy trabajando voy por ellos a la escuela, me despierto temprano y los llevo, paso por ellos y vamos al Karate, los llevo a hacer una tienda de campaña o los picnics, lo disfruto tanto que no lo cambiaría por nada", ha explicado la cantante. Eso sí, ser artista y madre no ha sido fácil de compaginar, como ha contado: " No lo podría lograr sin una familia, sin mi mamá y sin el seno familiar que ella me dio. Sí somos mamás trabajadoras, sí tenemos que chambear y dejar a los niños, con mi mamá o con el abuelo, o con el padre, pero mis hijos entienden muy bien el valor de tener a su madre, a la abuela que tienen".