Paulina Rubio ha solucionado los problemas judiciales que tenía pendientes después de una disputa que mantuvo con la Policía tras un pequeño accidente de tráfico el pasado mes de junio. La cantante ha llegado a un acuerdo con las autoridades para evitar ir a un juicio.
La mujer de Colate Vallejo-Nájera había sido acusada por parte de las autoridades estadounidenses de no acatar una orden judicial, de alterar el orden público y resistirse sin violencia a ser detenida después de que la Policía la pidiera la documentación de su vehículo y se negara a salir del mismo.
Paulina Rubio desacató las órdenes de la Policía
No obstante, la cantante mexicana, que tenía fijada la fecha del juicio para este miércoles 14 de septiembre, evitará tener que pasar por el trance de acudir al juzgado al haber alcanzado un acuerdo y no tener "antecedentes penales" y ser los cargos "delitos menores".
Según ha detallado la Fiscal, el desacato a una orden judicial y la alteración del orden público son delitos de segundo grado que son castigados con un máximo de 60 días de cárcel o realizando programas especiales. Por su parte, resistirse al arresto sin violencia conlleva una sentencia máxima de 364 días.