En ese momento, su padre Colate se puso en contacto con la periodista Beatriz Cortázar y le aseguró que su lucha judicial seguiría porque es el deseo de su hijo y que lo haría batallando en los juzgados para conseguirlo. Paulina Rubio no ha dado su brazo a torcer y ha presentado un escrito a los juzgados solicitando dos medidas urgentes: por un lado que el menor no pueda abandonar Miami y, por otro lado que se suspendan las visitas entre padre e hijo.
Según ha contado el periodista Alex Rodríguez en el programa 'Siéntese quien pueda', el documento incluye una declaración de Paulina Rubio en la que acusa a su expareja de manipular al menor 'para alinearlo en su contra' y ha movilizado a sus abogados para solicitar judicialmente que su hijo no vuelva a salir más de Miami y así poder controlar todo lo que sucede a su alrededor. Además, la intérprete mexicana ha asegurado que esta campaña tóxica le ha ocasionado un daño emocional al niño, dado 'el historial manipulador de Colate', aseguraba en el escrito que solicitó al juez.
Una lucha por la custodia de lo más conflictiva
Toda esta situación se les ha ido de las manos a ambos progenitores, ya que días previos a que Paulina Rubio diera este paso han protagonizado un sonado altercado en la estación del AVE de Segovia, después de que la cantante no quisiese personarse a recoger al niño para llevárselo a Miami y en su lugar mandase a su hermano y a su cuñada. Dicha situación ha provocado un arrebato de ira al empresario y padre de la criatura, que dijo: "Tiene que venir ella", y les negó a los familiares de Paulina Rubio llevarse a su hijo según señalaba la revista Lecturas.
Varios días después la cantante aterrizó en España para recoger a su hijo. La tensión entre ella y Colate era bastante evidente y saltó por los aires cuando la cantante se dio cuenta de que no tenía el pasaporte del niño. Según fuentes cercanas a la artista, el conflicto llegó a tal dimensión que tuvo que intervenir el cuerpo de la Policía Nacional para garantizar la seguridad. Finalmente, Paulina Rubio y Andrea Nicolás se trasladaron en coche hasta Lisboa, donde cogieron un vuelo dirección Miami.