La presentadora de 'Wifi Leaks' Patricia Conde se ha convertido en el centro de todas las miradas después de que se filtrara que la Fiscalía pedía para ella una pena de 2 años y 7 meses de prisión por un delito continuado de descubrimiento y revelación de secretos. La oficina la acusa de presentar como pruebas en su demanda de divorcio unos correos electrónicos de su exmarido, Carlos Seguí, que sustrajo sin permiso del ordenador personal que ambos compartían cuando eran pareja.
Sin embargo, Conde ha arrojado algo de luz sobre el tema y ha contado a Hola qué fue lo que realmente pasó. Ella y su exmarido se enfrentaron en dos procesos judiciales : uno por lo civil, para resolver todo lo concerniente a su divorcio y a la custodia del hijo que tienen en común; y otro por lo penal, en el que la presentadora denunció que había esta sufriendo maltrato psicológico por parte de Seguí.
En el último, el equipo legal del empresario solicitó más de 4 años de prisión a Conde por la falta antes mencionada, pero el Fiscal redujo la demanda a la mitad. Sin embargo, el juez acabó desestimando la petición y aceptó los mails que presentó la periodista como prueba. Finalmente, fue el propio Seguí quien acabó siendo condenado a 6 meses de cárcel, después de recurrir la sentencia y de que su apelación fuera rechazada.
Larga batalla judicial
Desde que Conde y su exmarido pusieron fin a su matrimonio en 2014, los dos han protagonizado una larga batalla judicial que todavía parece estar muy lejos de acabar. Ahora, el proceso civil que todavía sigue abierto, Seguí exige a la presentadora 20.000 euros en concepto de daños y prejuicios, además de 4.000 euros de pensión compensatoria, basándose en que ella gana más dinero que él. Con la futura libertad de la de Valladolid cuestionada, tanto ella como sus abogados han asegurado en ¡Hola! que están "muy tranquilos"