Allí han caminado por el paseo marítimo saludando a todos los que es encontraban ya disfrutando del buen tiempo en sus playas, quienes se iban agrupando en las aceras para ver y fotografiar a los Reyes. Y fue precisamente durante este paseo cuando tuvo lugar la que es sin duda la anécdota de la jornada.
Para conocer de primera mano como está evolucionando la economía tras la pandemia por el coronavirus, el Rey Felipe VI y la Reina Letizia decidieron hacer parada en una heladería turística del paseo ante la atenta mirada de turistas y los medios que se dedican a seguirlos durante estos días. Fue el propietario de la propia heladería el que atendió a los monarcas y les explicó cómo se encontraba el pequeño comercio.
"Nosotros, en casa, no tomamos azúucar"
Finalmente, la monarca rechazó la invitación mientras que el Rey Felipe VI si decidió probar uno de los helados, concretamente el más vendido de turrón. Nada más probarlo le hizo saber que estaba "muy bueno". Tras este curioso momento, ambos continuaron con su paseo por Benidorm. Horas más tarde, ya en la ciudad de Valencia, los Reyes asistieron al Museo de las Ciencias para una entrega de premios.