Pablo Puyol jamás se hubiese imaginado que su luna de miel fuese a empezar de la peor de las maneras. Lo que prometía ser un viaje inolvidable junto a su mujer, Beatriz Mur, se truncó antes de lo debido y se convirtió en una experiencia muy desagradable para ambos. Los dos pusieron rumbo a México, un país que él conoce muy bien porque estuvo viviendo allí un año por motivos profesionales, no obstante, la pesadilla comenzó para ellos cuando las autoridades les denegaron la entrada.
La pareja, tal y como ha contado él a la revista ¡Hola!, no pudo acceder, aunque al que realmente le denegaron la entrada fue al actor, acusándole de haber falsificado documentación para obtener su visa de trabajo en la época en la que estuvo viviendo allí y ahora ambos han sido deportados. El intérprete ha contado un poco lo sucedido: "Es que no tuve ningún problema, no había ningún delito ni nada parecido, simplemente, había un fallo en el visado de trabajo que obtuve hace años para trabajar en México".
parece ser que él viajó a dicho lugar ignorando que le fuesen a negar la entrada, por eso se sorprendió tanto, porque previamente no había tenido ningún problema y nadie le había avisado de que algo así podía suceder. " No, a mí nadie me notificó nada, yo estuve trabajando allí un año y por eso fui tranquilamente. Ahora tendré que aclararlo y arreglarlo por si algún día tengo que volver, aunque no me apetece nada", añadía.
Los dos lo pasaron muy mal porque no sabían qué estaba pasando, por eso ha añadido: " Nos tuvieron allí unas horas, me interrogaron y nos metieron en un avión de vuelta. Una anécdota más en mi vida, poco agradable",y ha contado cómo se lo tomó su ya mujer: " Al principio se lo tomó muy mal, pero estuvo conmigo en la reunión y pudo comprobar que ni yo tenía responsabilidad, ni tenía sentido lo que nos estaba ocurriendo. Y transcendió que el problema por el que no nos dejaban entrar era un problema por la visa de trabajo de hace cinco años. Una cosa muy ridícula".
Va a solucionarlo
Al menos él está tranquilo porque sabe que no ha hecho nada malo: "Además de tener la conciencia tranquila, no es nada grave, lo único que fue muy desagradable y horroroso porque perdimos los gastos de todo y hubo que rearmar una luna de miel". Ahora intentará solucionar su situación por si regresa a dicho país, aunque no tiene ganas de volver a México. " Sí, sobre todo por cómo trataron a mi chica, porque contra ella no tenían nada, solo contra mí, y la aislaron y la incomunicaron igualmente. Ella sí podía haber entrado, pero, al venir conmigo, la trataron como si fuese una delincuente". ha concluido.
