Una situación angustiosa
En la declaración de la vista oral, la pareja ha asegurado que temieron por la seguridad de sus hijos ante el acoso del periodista Alejandro Entrambasaguas, lo que les obligó a cambiar sus rutinas y la escuela infantil de sus hijos al sentir miedo, angustia y ansiedad, ya que "la situación no paraba, sino que se reproducía". Una situación de acoso que también habría padecido la cuidadora de los bebés.
Irene Montero sostiene que la niñera les alertó de las visitas y llamadas de Entrambasaguas, que ha cifrado en más de 70. Una situación que les hizo temer por la seguridad de la familia y que incluso llevó a la cuidadora de los pequeños a dejar su puesto de trabajo por miedo. Por su parte, Pablo Iglesias ha calificado la situación como muy angustiosa y ha comentado a los medios de comunicación que espera que esta situación no le ocurra a nadie.
El supuesto acosador ha defendido en el juicio que solo trataba de confirmar si la "madre de día" trabajaba de forma legal y si esa era la escuela a la que Pablo Iglesias e Irene Montero llevaban a sus hijos por el interés mediático que ello conllevaba. Según su versión acudió en cuatro ocasiones al centro, pero jamás quiso acercarse a los hijos de Iglesias y Montero ni preguntó a nadie por ellos. Por su parte, la Fiscalía de Madrid pide un año de cárcel para el periodista y exime a Eduardo Inda, representante legal de la empresa titular del periódico, que fue denunciado inicialmente por la pareja.