Según pudo saber 'Socialité' al día siguiente, dos de sus invitados habrían acabado tirándose de los pelos, Oto Vans y Pablo Castellano, el marido de María Pombo. Según informaban, el que fue concursante de 'Supervivientes' había estado metiéndose -no de buenas maneras- con la otra influencer, algo que enfadó mucho a su pareja que propinó un empujón a Oto Vans empezando así la supuesta pelea. Esta además causaría algún que otro destrozo en la zona del hotel en la que se encontraban, obligando a la dirección del mismo a tener una reunión al día siguiente para tomar medidas. Finalmente a primera de la mañana María Pombo, Pablo Castellano y Oto Vans habrían sido invitados a abandonar las instalaciones poniendo rumbo de nuevo a la península.
Ninguno hace alusión directa a la pelea
Y tras su vuelta a casa, ambas partes han roto el silencio sobre el viaje después de que nadie de los allí presentes hubiese hablado de ello. Pablo Castellano y María Pombo fueron pillados en el aeropuerto llegando a Madrid desde Ibiza y fue allí mismo donde hizo las primas declaraciones al respecto: "Aquí estoy, fenomenal", decía negando que hubiese tal pelea: "Nada de nada, todo súper divertido y muy bien". La influencer también se quiso pronunciar en defensa de su marido añadiendo: "No os preocupéis, de verdad, que todo está bien", decía con una sonrisa en las declaraciones recogidas por Divinity.
Oto Vans en cambio se manifestó a través de sus redes sociales, concretamente a través de los stories. Junto a una fotografía subida por Dulceida en la que se veía a la gran mayoría de los invitados antes de poner rumbo a Ibiza, escribía el siguiente mensaje: "Ha sido un finde genial, he conocido gente genial, Aída, eres una monada, super agradecido de habernos cuidado tan bien, a ti, y a tu equipo, gracias". Unas palabras que daban a entender que nada malo había ocurrido durante el #Dulce30 y que realmente si se había tratado de un verdadero viaje de ensueño.