En datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) el accidente cerebrovascular y la cardiopatía isquémica son las dos principales causas de muerte en el mundo. Según esta institución, en base a los últimos datos conocidos (2015), 15 millones de personas fallecieron debido a estas dos causas. Por ello, con el objetivo de concienciar a la población, el 29 de noviembre se celebra el Día Mundial del Ictus, tan solo un mes más tarde que el día elegido para celebrar el Día Mundial del Corazón.
Accidente o ataque cerebrovascular, infarto cerebral, derrame cerebral o apoplejía son los términos utilizados para hablar del ictus. Este consiste en una alteración del flujo sanguíneo que llega al cerebro, la cual puede ser de dos tipos: hemorrágica, en la que se produce un sangrado dentro del cerebro o isquémica, en la que se un coágulo obstruye las arterias que van al cerebro impidiendo que llegue el flujo de sangre. Aunque diferentes, el desenlace de ambos suele ser el mismo, la lesión de las células del cerebro con la consiguiente pérdida de neuronas.
Las causas de esta dolencia son de diversa índole, pero las más comunes son una dieta desequilibrada, sedentarismo, tabaquismo y el consumo nocivo de alcohol. No obstante, el código genético también juega un papel importante. También se deben considerar un mal control de la tensión arterial, aumento del colesterol, diabetes mellitus mal controlada y estrés.
Los síntomas de un infarto cerebral suelen ser varios. Los más generales son pérdida de fuerza en la mitad del cuerpo, alteración del lenguaje y/o pérdida de visión. También se puede presentar un entumecimiento en la cara, piernas o brazos, dificultad para caminar, mareos, pérdida de equilibrio o coordinación, dolor de cabeza intenso y pérdida de conciencia, tal y como detalle la OMS en su página web. Ante la presencia de cualquiera de estos signos se debe acudir a los servicios de emergencia lo antes posible, puesto que la efectividad del tratamiento y las posibilidades de recuperación dependen fundamentalmente de la rapidez de la atención médica. El ictus es peligroso, pero no imposible de vencer, tal y como han demostrado estos 8 famosos:
1 María Teresa Campos
El caso de María Teresa Campos es un claro ejemplo de lo importante que es conocer y detectar los síntomas del infarto cerebral a tiempo. El 16 de mayo de 2017 la presentadora comenzó a manifestar una parálisis facial, mareos y pérdida de visión en uno de los ojos, por lo que se apresuró a acudir de urgencias a la Fundación Jiménez Díaz. Allí fue ingresada en la unidad de Ictus del centro, donde le trataron con avidez.
Días más tarde a su ingreso, Carmen Borrego, la hija de Campos, salía para hablar con los medios sobre el estado de salud de su madre. En sus declaraciones aseguró que la presentadora mejoraba favorablemente, y que lo importante era haber autodetectado los síntomas a tiempo, ya que "el tratamiento que se da en las primeras horas tras sufrir el ictus es fundamental, y si pasan más horas no se puede aplicar", tal y como expresó para los medios.
Consecuencia de la rápida intervención, la que fuera presentadora de 'Qué tiempo tan feliz' disfruta de una buena salud junto a sus hijas y a su pareja, Bigote Arrocet, que se encontraba participando en 'Supervivientes' durante el dramático suceso.
2 Silvia Abascal
A Silvia Abascal la enfermedad se le presentó de sorpresa durante la clausura del Festival de Cine de Málaga en 2011. La actriz, que además era miembro del jurado, sintió un repentino dolor de cabeza, que le hizo perder el conocimiento. Inmediatamente, fue trasladada al hospital Carlos Haya, en el que fue operada de urgencias. Una vez realizada esta intervención, la intérprete tuvo que volver a pasar por quirófano, esta vez en el hospital Gregorio Marañón de Madrid, donde le practicaron una nueva intervención, más agresiva, la cual le garantizaba la eliminación completa de la malformación congénita que había derivado en ictus.
La historia de lucha y superación de la actriz está considerada hoy en día como un ejemplo a seguir. De hecho, en 2013 sacó a la venta 'Silvia Abascal. Todo un viaje', un libro donde relata cómo fueron los primeros síntomas del infarto y cómo ha sido su vida desde entonces.
3 Montserrat Caballé
Hasta ahora se ha comprobado que los síntomas que presentaron los ejemplos anteriores fueron diferentes. En el caso de Montserrat Caballé fue un repentino desvanecimiento lo que le hizo ingresar en el hospital, aunque la causa de su ingreso no fue el mareo, sino que durante la caída se rompió el húmero. Allí, aparte de la fractura, le diagnosticaron un ictus de carácter leve del que fue tratada con gran éxito.
La soprano fue tratada en el hospital de Sant Pau de Barcelona, aunque el incidente ocurrió nada más y nada menos que en Rusia, en octubre de 2012.
4 Jaime de Marichalar
El ictus que padeció Jaime de Marichalar fue uno de los más graves expuestos hasta ahora, ya que hasta se llegó a temer por su vida. El por aquel entonces yerno del Rey Juan Carlos sufrió en las navidades de 2001 un severo infarto cerebral del que tuvo que ser tratado de emergencia.
A pesar de la gravedad del asunto, el exmarido de Elena de Borbón logró superar el trance con éxito, aunque le dejó una serie de secuelas temporales, como tener que caminar apoyado de un bastón para mantener el equilibrio.
5 Kirk Douglas
Por desgracia, las secuelas que le quedaron a Kirk Douglas no fueron temporales, como las de Marichalar, sino que el ictus que sufrió en 1996 fue tan severo que arrastra desde entonces la paralización de un lado del rostro y problemas psicomotrices que le impiden andar con normalidad.
No obstante, el que diera vida a Espartaco, guarda una salud de hierro. Tal es así que ha alcanzado los 101 años, convirtiéndose en 'La última pantera', el último actor superviviente de los años dorados de Hollywood junto con Olivia de Havilland.
6 Sharon Stone
El mismo año que Jaime de Marichalar, Sharon Stone sufrió un infarto cerebral. Al igual que los dos casos anteriores, a raíz de la lesión cerebral, la actriz de 'Instinto básico' sufrió una alteración en el nervio auditivo que le ha provocado problemas de audición irreversibles.
En el caso de la intérprete el derrame cerebral vino provocado por un aneurisma, que supone tener una zona debilitada en la pared de un vaso sanguíneo, en este caso del cerebro. Esta dolencia generalmente es congénita, aunque también se puede desarrollar.
7 Joaquín Sabina
2001 no fue un buen año para los accidentes cerebrovasculares, ya que en esa misma fecha Joaquín Sabina también ingresaba por accidente isquémico. Su caso, afortunadamente, difiere de los anteriores, ya que él no tiene ninguna secuela, aunque el susto le ha obligado a mantener una vida más ordenada y alejada de excesos.
8 Julián Muñoz
El ex alcalde de Marbella sufrió en 2014 severo ictus durante su estancia en la prisión de Alhaurín de la Torre. Debido a la gravedad del asunto, el reo fue trasladado a un hospital en Málaga, donde le trataron con éxito.
La noticia saltaba durante la emisión del programa 'Sálvame' y fue Paz Padilla la encargada de dar la noticia. A su vez, Mila Ximénez añadió que la familia de Julián Muñoz llevaba tiempo solicitando su excarcelación para efectuar su internamiento en un centro hospitalario, ya que veían su salud muy deteriorada.