La influencer ha vivido momentos complicados después de que Ezequiel Garay diera positivo por coronavirus. La pareja estuvo mucho tiempo sin poder abrazarse ni besarse a pesar de estar en la misma casa pero, sobre todo, ambos sufrieron mucho por no poder estar con sus hijos, a quienes prefirieron dejar en otra cosa para evitar problemas mayores. Ahora es otra persona de la familia de Tamara Gorro quien está pasando por una situación delicada: su abuela.
Era la propia influencer la que contaba en Instagram lo que le había sucedido a su abuela: "Pues sí, odio el 2020 con todas mis putas ganas. Perdón por la expresión, pero es lo que siento. Ayer estábamos pasando una gran tarde con amigos, buen ambiente... Bueno, espectacular. Y, de repente, cuando parece que todo está terminando y te vas a casa con esa buena energía, te llaman y mi Yaya está ingresada en el hospital. Toda esa alegría y esa felicidad se van a la mierda en un segundo, que a muchos os habrá pasado. Que horror. A priori no es por la Covid pero le van a hacer la prueba igualmente".
Momentos de tensión y preocupación
La influencer también ha querido dedicarle unas bonitas palabras a su abuela: "Y de nuevo toca coger impulso, para derribar otro obstáculo. Esta vez, ese ingrediente imprescindible del que tanto hablo se salió del cóctel, la salud. Pero quedan otros muchos que harán que todo vuelva a la coctelera de la felicidad: Unión, amor, fuerza y ganas. Yayita, la única diferencia es que no podrás tenernos veinticuatro horas a tu lado, pero cuentas con algo mágico, el personal sanitario, ellos harán que todo termine pronto, mi amor...".