El cantante confiesa en una entrevista que Baylor, el nuevo cachorro de la pareja, fue un capricho de Selena Gomez.
La bonita paternidad de Selena Gomez y Justin Bieber, que la semana pasada adoptaron juntos un cachorro llamado Baylor, no es tan idílica como parecía. En una reciente entrevista con Access Hollywood, Bieber confiesa que más que una decisión mutua, la adopción de Baylor fue un capricho de su novia Selena: "Fuimos al refugio de animales sólo para ver pero mi novia se enamoró de él y me dijo que tenía que tenerlo", confiesa. El joven cantante canadiense asegura además que él y Baylor no se llevan del todo bien: "El perro la vio y la siguió todo el rato. No creo que el perro me quiera tanto a mí", desvela.
Selena ya nos presentó esta semana al cachorro que se ha convertido en su nuevo amigo inseparable. Bieber, en cambio, no parece estar demasiado interesado por él: "creo que el perro está ahora de gira con ella, no conozco toda la vida del perro al detalle", declaró sin mostrar demasiado interés por la nueva mascota.Selena Gomez es una confesa enamorada de los animales, de los perros en particular. La actriz de 'Los magos de Waverly Place' tiene con Baylor seis canes, la mayoría adoptados en refugios o recogidos en la calle.
Justin Bieber defiende sus excéntricas citas a lo grande
Por otro lado, Bieber justificó sus recientes citas a lo grande con Selena Gomez, cerrando todo un estadio para ver una película en compañía de su pareja. Más allá de un acto de prepotencia y de muestra de dinero, Bieber lo ve como una forma de poder tener tranquilidad lejos de las miradas públicas a las que su fama le tiene sometido."Cuando voy al cine me gusta ver la película, pero todo el mundo me está mirando a mí como si fuera la película", se quejaba amargamente.