La muerte de Gene Hackman y su mujer Betsy Arawaka ha dado un giro de 180 grados después de conocer un hecho de lo más sorprendente. El 27 de febrero de 2025, los medios de comunicación se hicieron eco de la muerte del actor y su mujer en su domicilio de Santa Fe, en Nuevo Mexico, junto a uno de sus perros. En un primer momento, la hija del actor, Elisabeth Hackman, apuntó a una inhalación de gases tóxicos debido a una posible fuga de gas como causante de las muertes de su padre y de la mujer de este. Hasta el domicilio se desplazó la compañía de gas del estado de Nuevo Mexico para comprobar si se había producido dicha fuga de gas. Después de examinar todas las líneas de gas, la compañía aseguró que no se había producido ninguna fuga.
Gene Hackman en la película 'La Conversación'Tras una minuciosa investigación por parte de la policía, El forense detalló en la autopsia que Betsy Arawaka había muerto el 11 de febrero de 2025 a causa de un síndrome pulmonar provocado por el hantavirus, un virus trasmitido por ratones, mientras que Gene Hackman falleció seis días después que su mujer, el 17 de febrero de 2025, debido a una afección cardiaca. Con respecto a la muerte de uno de sus perros en su jaula se debió a la falta de agua y alimentación, ya que no tenía evidencias de infección, traumatismos o envenenamiento, algo que no sucedió con los otros dos perros. Sin embargo, un nuevo testimonio ha puesto la cronología del caso de la muerte de Gene Hackman y su mujer en tela de juicio.
El doctor Josiah Child, director del centro médico Cloudberry Health de Santa Fe, ha asegurado haber hablado con Betsy Arawaka el pasado 12 de febrero de 2025, un día después de haber muerto, tal y como ha apuntado la autopsia.
El doctor ha concedido unas declaraciones para el medio de comunicación Daily Mail y ha desvelado su conversación con la pianista: " La señora Hackman no murió el 11 de febrero porque llamó a mi clínica el pasado 12 de febrero de 2025. Había llamado unas semanas antes de su muerte para preguntar por un ecocardiograma y un escáner de corazón para su marido. No era paciente mío, pero uno de mis pacientes le había recomendado mi clínica. Pidió una cita para ella misma el mismo día 12 de febrero, pero no tenía nada que ver con algo respiratorio ", explicó el médico sobre su conversación con Betsy Arawaka.
Gene Hackman en una de sus películasEl médico explicó que esa cita que había pedido semanas antes para su marido la canceló debido a que el actor no se encontraba bien: " Ella volvió a llamar en la mañana del 12 de febrero y habló con uno de nuestros médicos, que le dijo que viniera esa tarde. No mostró ningún síntoma de afección respiratoria y su cita no tenía nada que ver con el hantavirus", añadió el médico. " Le intentamos llamar en un par de ocasiones sin obtener respuesta ", aseguró el doctor Josiah Child. La existencia de esta llamada ha dado un giro de 180 grados a la investigación de las muertes del actor y la pianista y ha desmontado lo recogido en la autopsia.
Se complica aún más la batalla legal por la herencia
Tras el fallecimiento de Gene Hackman y Betsy Arawaka, con una fortuna valorada en 80 millones de dólares y un domicilio valorado en 3,8 millones de dólares, su hijo, fruto del matrimonio con su exmujer Faye Maltese, Christopher Hackman ha comenzado a mover fichas para evitar problemas. En el testamento del actor se ha recogido que toda su fortuna iba a parar a su mujer Betsy Arawaka y sus hijos quedarían fuera del testamento. La ley en el estado de Nuevo Mexico recoge que, si el actor y la pianista hubieran fallecido con una diferencia de cinco días, las muertes serían clasificadas como simultáneas y la fortuna destinada a Betsy Arawaka pasaría a la familia de la pianista dejando a los hijos del actor sin nada. Por el momento, en la autopsia se desvela una diferencia de seis días por lo que no se aplicaría esta ley, pero al conocer la existencia de una llamada de Betsy Arawaka un día después de su muerte oficial, las cosas podrían cambiar y los hijos del actor podrían perder toda la fortuna, pues las muertes serían clasificadas como simultáneas con una diferencia de solo cinco días.
