Kiko Rivera fue el protagonista del primer programa de 'Cantora: La herencia envenenada' al descubrir algunos aspectos del testamento de su padre Paquirri que él desconocía porque, supuestamente, su madre se los había ocultado. Tras esto, han venido otros muchos problemas entre ellos, como el famoso coche que Isabel Pantoja le ha quitado aunque Kiko Rivera asegura que lo pagaba él o el nulo contacto de esa abuela con sus nietas, quienes han perdido en un año a sus otros dos abuelos, padres de Irene Rosales.
Pues bien, parece que Kiko Rivera ha encontrado en Mila Ximénez y en las exclusivas su forma de escape y, por eso, ha vuelto a conceder una entrevista en la revista Lecturas donde lanza mensajes de lo más duros: "Mi madre me debe 3 millones pero no quiero verla en la cárcel. Tengo motivos para demandarla, pero no quiero meterla en la cárcel", reza el titular del DJ. Sin duda, unas palabras de lo más delicadas y llenas de rencor pero que quitan la pena que siente Kiko Rivera: "Ha sido muy complicado. No deja de ser mi madre".
Kiko Rivera también ha revelado algo que nunca se llegó a decir y que levantaba mucha curiosidad entre los que están siguiendo esta historia. Irene Rosales contó que Isabel Pantoja había felicitado a su hija por su cumpleaños con un audio poco apropiado. Ahora, el DJ ha revelado el contenido: "Mi madre le mandó un audio a mi hija para felicitarle el cumpleaños y decía: 'si tu madre tiene tiempo entre tele y tele, que te ponga este audio. Soy tu abuela, la que creen que está muerta. ¡Ha resucitado!".
Sin ninguna comunicación
Para Kiko Rivera no está siendo nada fácil porque él y su madre han sido uña y carne toda su vida: "¡Ese dolor lo tengo! ¿Sabes lo que ha sido este último fin de año? Desde que tengo uso de razón lo he pasado en Cantora. ¡Es tan duro ser huérfano sin serlo!", cuenta en la entrevista. Además, asegura que no sabe a ciencia cierta cómo se encuentra su madre: "Mi prima y mi hermana me dicen que está de puta madre, que está más delgada pero que es normal. Una amiga me dice que está fatal".
En alguna ocasión, Kiko Rivera ha contado que ha intentado acercar posturas con su madre pero parece que eso se ha quedado muy lejos: "He tenido que borrar el número de teléfono de mi madre para no llamarla. Me puede el sentimiento, todos los días tengo la tentación de llamarla". Por si esto fuera poco, el DJ parece encontrarse en medio de dos personas que siempre han sido familia pero que ahora son casi enemigos: "A lo mejor he sido un estorbo entre mi tío y mi madre y ahora es cuando están a gusto". Sin duda, unas declaraciones incendiarias.