La organización Fashion for Relief fue creada en el año 2005 con el fin de recaudar fondos para las víctimas del huracán Katrina y posteriormente para seguir haciéndolo para otras muchas causas humanitarias. Para ello cada año se celebraba una gala a la que no faltaba ni un perejil del famoseo, especialmente del mundo de la moda, para asistir a una gala con un desfile con grandes supermodelos como protagonistas así como subasta de artículos como dibujos de Matisse o Dalí, un grabado de Andy Warhol...
En cambio, de las millonarias ganancias que recaudaban Naomi Campbell y sus otros socios de Fashion for Relief, solo una muy pequeña parte llegaba a las asociaciones benéficas con las que colaboraban mientras que el resto se destinaba, entre otras cosas, a gastos y lujos para la ya polémica supermodelo.
Según un informe recientemente publicado tras la investigación de la Charity Commission de Reino Unido motivado a raíz de la denuncia en 2016 de Save the Children y el Mayor's Fund for London, Fashion for Relief recaudó entre 2015 y 2020 un total de 4,8 millones de libras, pero solo el 10% de esos beneficios se destinaron a subvencionar esas organizaciones benéficas con las que colaboraban. Estas bajas donaciones fue lo que motivó la denuncia a la organización benéfica años atrás porque de lo que se decía públicamente a lo que luego ellos recibían había una llamativa diferencia.
Ese dinero, en parte, iba destinado a costear gastos de Naomi Campbell en todo aquello que pudiera estar relacionado con Fashion for Relief. Por ejemplo en 2018 y con motivo de la presencia en Cannes de la supermodelo para una de las famosas galas de la organización, con el dinero recaudado se pagaron 3 noches de hotel a 3.000 euros para ella. A esto se sumó una factura de otros 8.000 euros que incluían tratamientos de spa, servicio de habitaciones y cigarrillos.
La respuesta de Naomi Cambpell
Sobre este informe Naomi Campbell ya se ha pronunciado públicamente asegurando que este informe tiene "conclusiones incompletas y engañosas" y que ella "no estaba involucrada en las operaciones diarias" de la organización. "He dado instrucciones a nuevos asesores para que realicen una investigación detallada de lo ocurrido", asegura la propia supermodelo negando esa desviación de fondos para sus propios gastos: "Nunca he realizado ninguna labor filantrópica para obtener un beneficio personal, ni jamás lo haré. Contrariamente a lo que dicen los medios de comunicación, nunca he recibido ningún pago por mi participación en Fashion for Relief ni he facturado ningún gasto personal a la organización".