Francia se ha convertido en el lugar elegido por Zoë Kravitz y Karl Glusman para celebrar su boda en la exclusiva mansión que tiene el padre de la actriz en París. Ellos no han sido los únicos famosos que han elegido dicho país para un día tan especial, porque justo en el mismo fin de semana se han casado en Francia Joe Jonas y Sophie Turner, así como Carlota Casiraghi, aunque ella lo ha hecho en la Provenza francesa.
Esta boda ha conseguido reunir a numerosos rostros conocidos de Hollywood, que quisieron ser testigos de la boda de la hija de Kravitz y Lisa Bonet. Entre los presentes destacaron Nicole Kidman, que llegó en un discreto coche y no saludó a los fans, Laura Dern, Shailene Woodley o Reese Whiterspoon, todas compañeras de Zoë Kravitz en la serie de HBO 'Big Little Lies', con la que se nota que ha hecho piña.
Por otro lado, contó con la presencia de Denzel Washington y su mujer, o el actor Chris Pine. La modelo Cara Delevingne fue otra de las invitadas, y asistió acompañada de Ashley Benson. Y cómo no, sus padres fueron unos de los invitados de honor. Mientras que Lenny Kravitz aparecía solo y muy simpático con la prensa, Lisa Bonet viajó hasta Francia acompañada por su marido, el actor Jason Momoa, y sus dos hijos pequeños, Lola y Nakoa-Wolf.
Una presencia que llamó especialmente la atención fue la de la española Goya Toledo. El marido de la actriz es Craig Ross, guitarrista de Lenny Kravitz, por lo que se entiende que estuviera presente acompañando a su marido.
Una relación muy consolidada
Fue en 2016 cuando la pareja se enamoró cuando se conocieron a través de amigos en común, y todo parece apuntar a que fue amor a primera vista. Al instante sentí algo, luego se dio la vuelta y comenzó a hablar con la chica rubia que estaba a su lado y yo pensé: 'Espera, ¿qué?' Pero luego me dijo que estaba nervioso", dijo la actriz en una ocasión. Fue en febrero de 2018 cuando Glusman le pidió matrimonio después de ocho meses juntos.