Si bien las prendas de su armario no han cambiado mucho desde que se quedó embarazada -según hemos podido ir viendo con las imagenes que la actriz subía a sus redes sociales-, lo que sí que lo ha hecho han sido las relaciones con su marido Ryan Dorsey.
En unas declaraciones para People, Rivera comentaba cómo el segundo trimestre de su embarazo había condicionado dramáticamente tanto a ella como a su marido en la cama. La estrella de 'Glee' recuerda "cosas como el sexo con mi marido se han convertido en algo raro para mí, debido al hecho de que ahora sólo podemos hacer dos posturas, porque si no me aplasta".
Rivera también reveló que había empezado a experimentar fuertes patadas de su futuro hijo: "Había notado que se movía de aquí para allá durante todo el primer trimestre, ¡pero esque ahora el bebé se ha convertido en una máquina de dar patadas!". También comentó que a partir de cuarto mes de embarazo ha comenzado a sentirse con más energía.
Un noviazgo de menos de tres meses
La actriz de Glee y Ryan Dorsey se casaron en el Cabo de San Lucas, en México . Tras menos de tres meses siendo novios, la pareja decidió darse el 'sí quiero' porque consideraban que estaban predestinados.
De hecho, el día de su boda aun no habían pasado ni tres meses desde que Naya Rivera rompiera su relación con Big Sean, con quien llevaba saliendo medio año y tenía planes de matrimonio que, evidentemente, nunca llegaron a cumplirse. Ahora Naya Rivera está a punto de formar una familia junto a Dorsey.