Galería: Alfombra roja Premios Oscar 2020
Natalie Portman aparecía sobre la alfombra roja de los premios Oscar 2020 con un abrigo en el que se podía leer los apellidos de directoras de cine que podrían ser nominadas en la categoría de Mejor dirección pero que, en cambio, habían sido ignoradas por la Academia. Un gesto muy aplaudido en todo el mundo pero que no convenció a Rose McGowan, uno de los rostros más representativos del movimiento #MeToo. Esta la tildo su gesto feminista a través de una carta en su muro de Facebook de "un fraude" y lo consideró "profundamente ofensivo para las mujeres que realmente estamos haciendo todo el trabajo". Tras una serie de argumentos poniendo en duda el falso apoyo a las mujeres del sector le pidió tanto a ella como a otras grandes estrellas que dejasen de "fingir que son heroínas porque lo único que defienden es a ellas mismas".
Tras esto, la principal acusada en todo este relato respondió mediante un comunicado a los medios en los que explicaba cuál era su posición respecto a este tema. "Estoy de acuerdo en que no es muy acertado llamarme 'valiente' por llevar una capa con nombres de mujer bordados", decía respecto a las acusaciones de la también actriz: " Valiente es un término que yo asocio más a todas las mujeres que han estado testificando contra Harvey Weinstein las última semanas bajo mucha presión ", decía haciendo alusión al juicio contra el exproductor de cine y cuyas acusaciones dieron lugar al conocido movimiento #MeToo y destaparon el lado oscuro del cine en Hollywood.
"No es muy acertado llamarme 'valiente' por llevar una capa con nombres bordados"
Portman también quiso hacer alusión a las palabras de McGowan en las que le echaba en cara no trabajar con mujeres y tener una productora en la que la única contratada era ella misma: "En los últimos años he visto florecer a muchas mujeres directoras a las que se le he dado una oportunidad gracias al esfuerzo colectivo de mucha gente que ha estado luchando contra el sistema. El regalo han sido sus increíbles películas. Espero que lo que era un simple guiño a estas mujeres no nos distraiga de sus grandes logros ", decía en alusión a la capa de la discordia. "En mi larga carrera solo tuve la oportunidad de trabajar en dos películas dirigidas por mujeres", en cambio apuntaba que " he protagonizado cortometrajes, anuncios, vídeos musicales y otras piezas audiovisuales dirigidas por artistas femeninas " mientras mencionaba alguno de los nombres de esas mujeres.
" Por desgracia las películas que intenté hacer con otras directoras que nunca salieron a la luz son hoy una historia de fantasmas ", y saca a relucir de nuevo el gran handicap de las en la industria: "Está demostrado que las mujeres encuentran muy difícil financiar sus proyectos tanto a través de los estudios como de manera independiente. Y que cuando lo consiguen, esas autoras tienen que enfrentar a enormes desafíos durante su realización", asegura mientras habla de casos que ha vivido en primera persona: " Personalmente, más de una vez he tenido la experiencia de ayudar a contratar a directoras en proyectos que luego se vieron obligadas a abandonar debido a las condiciones que enfrentaban en el trabajo".
"Lo he intentado y lo seguiré intentando aunque todavía no he tenido éxito"
Y no solo eso: "Aquellas que lograban acabarlo se encontraban nuevas dificultades para que admitieran su obra en festivales, para que las distribuyeran o incluso para recibir elogios debido a los cortafuegos que lo evitar en todos los niveles". Tras eso sentencia: " Por eso quiero decir que lo he intentado y que lo seguiré intentado. Y aunque sé que todavía no he tenido éxito, espero de verdad que estemos entrando en una nueva época ", terminaba así su escrito de defensa con el que la actriz Natalie Portman también advierte que con sus palabras no pretende abrir una pelea mediática con Rose McGowan.