Natalie Portman, actriz ganadora de los cuatro grandes premios del cine por su increíble papel en ' Cisne Negro ', se ha abierto sobre cómo empezar tan joven en el mundo de la interpretación le frenó en el desarrollo de su sexualidad. Estas confesiones las ha hecho en el podcast 'Sillón del experto', de Dax Shepard, donde ha reconocido que construyó fortalezas para protegerse de la atención masculina no deseada cuando era una joven actriz.
Desde que tenía 11 años, la joven actriz se dedicó en cuerpo y alma a su pasión: la interpretación. Portman comenzó en la gran pantalla con su papel de Matilda en 'El profesional' y, después de este gran papel, vinieron otros éxitos en películas como ' Beautiful Girls ', de Ted Demme. Y, gracias a estas impresionantes interpretaciones, Natalie Portman creó un personaje muy cotizado. Pero estos papales también la convirtieron en objeto de deseo siendo una adolescente.
Camuflada en su fuerte personalidad
Además, la actriz confesó que, debido a esto, tuvo que construir una personalidad fuerte que le ayudó a refugiarse en esos momentos. "La única forma en que podía estar segura era diciendo 'soy conservadora y hablo en serio, y debes respetarme, y soy inteligente y no me mires de esa manera'", cuenta la actriz. "Mucha gente tuvo una impresión muy brusca de mí, de que era muy seria, mojigata y conservadora a medida que crecía... Esto lo cultivé conscientemente porque era una forma de hacerme sentir segura. Si alguien te respeta, no te hará sentir como un objeto", confiesa.
Durante la charla, Portman también confesó que con apenas 13 años tuvo que rechazar un papel donde se contaba la historia de un hombre que acosa sexualmente a un niña de 12 años, la cual tendría que interpretar. "Como es normal, a esa edad tienes tu propia sexualidad, tu propio deseo, y quieres explorar cosas y ser abierta. Pero no te sientes segura cuando hay hombres mayores que están interesados en ti, y tienes que decir siempre: ' No, no, no, no '", acabó.