Ana Obregón ha anunciado a través de su cuenta de Instagram que su padre, Antonio García, ha muerto a los 96 años. La actriz había aplazado sus compromisos profesionales y había cancelado algunos planes de su agenda para poder estar con él en sus últimos días de vida, ya que su estado de salud era muy delicado, algo que adelantó su representante Susana Uribarri.
La televisiva ha compartido varias fotos en sus redes sociales a modo de despedida, dándole el último adiós y deseando que muy pronto puede reunirse con su madre y con su hijo Álex Lequio, fallecidos en 2021 y 2020 respectivamente. El constructor se había convertido en un gran apoyo para su hija en los peores momentos, sin embargo, ella había dejado claro en más de una ocasión el increíble vacío que sentía su padre tras la muerte de su madre, justo un año después de la muerte de su hijo.
La publicación de Ana Obregón a modo de carta empieza de la siguiente manera: "AMADO PAPÁ. Anoche nos dejaste. Fue como un rugido que surcó el cielo para reencontrarte con Mamá, el amor de tu vida y con mi hijo, tu nieto preferido. Has vivido 96 años; difíciles en tu infancia cuando tuviste que empezar a trabaja r durante la guerra cuando apenas eras un niño de 12 años limpiando pocilgas, pero con tu pasión y tu trabajo incansable durante 70 años conseguiste crear una gran empresa. Por eso recibiste una merecida 'Medalla al mérito del trabajo'", cuenta, hablando de cómo logró ganarse un hueco y conseguir sus metas.
"He coleccionado millones de momentos únicos contigo que guardo tatuados en mi corazón y que ahora utilizaré para poder seguir respirando porque en dos años me habéis dejado huérfana de padres y de hijo. Ahora las tres personas que más quiero en mi vida no estáis aquí conmigo y te juro , Papa , que no sé cómo lo voy a hacer. Es un privilegio y un gran honor ser tu hija. Gracias Papá por tanto. Te quiero infinito. Por favor cuida mucho de mi hijo hasta que llegue. Eternamente juntos. Tu hija Ana #papa #eternamentejuntos", termina diciendo, agradecida por todo lo que ha compartido con él a lo largo de los años.
Se volcó en su padre
Sin duda alguna este es un duro golpe para la presentadora, que aún continúa lidiando con la ausencia de su hijo y de su madre. La muerte de Álex Lequio fue el momento más complicado para ella, y al año siguiente se tuvo que enfrentar a la muerte de su madre, aunque como ha contado, siente que no la ha llorado lo suficiente porque lo de su hijo lo tiene muy reciente. Entre tanto, decidió volcarse en el cuidado de su padre y en su trabajo, intentando continuar con su vida a pesar de la tristeza que siente por la ausencia de su hijo.