Chiquito de la Calzada no ha podido más. El corazón del humorista se apagó para siempre a las 3 de la madrugada de este sábado 11 de noviembre en el Hospital Carlos Haya de Málaga, donde había tenido que ser ingresado por complicaciones de su frágil estado de salud.
El pasado 14 de octubre ya tuvo que ser internado en este mismo centro al sufrir una caída en su domicilio a causa de una deshidratación producida por una medicación que estaba tomando. El humorista fue rescatado por los bomberos, que entraron en la vivienda a través de un vehículo autoescala debido a que vivía solo y tenía las llaves puestas por dentro.
Finalmente, Chiquito de la Calzada logró recuperarse y regresó a su domicilio, pero su salud ya no volvió a ser la misma y no tardó en regresar al centro médico. En esta segunda ocasión fue más grave. El 31 de octubre ingresó por una angina de pecho, y ya no logró reponerse. El humorista fue sometido a un cateterismo, pero cogió una infección que le provocó un deterioro hemodinámico. Finalmente se le indujo en coma, pero no pudo reponerse y falleció.
Chiquito de la Calzada mantuvo buena salud casi hasta el final de su vida, si bien es cierto que su vida tuvo un poso de amargura desde la muerte de su mujer, Josefa García Gómez, fallecida en 2012. Gregorio Esteban Sánchez Fernández, nombre real de Chiquito, pasó con ella 50 años. El matrimonio no tuvo hijos, y cuando ella murió, él quedó destrozado y jamás logró superar la pérdida. De hecho, cuando participó en 'Mi casa es la tuya' en octubre de 2016, Paz Padilla, íntima amiga de Chiquito, comentó que recuerda el desconsuelo del humorista cuando murió su esposa: 'Se me ha ido la vida contigo, ¿por qué me haces esto Pepita?'".
Un humorista irrepetible
Gregorio Esteban Sánchez Fernández nació el 28 de mayo de 1932 en el barrio de la Trinidad de Málaga. Se dedicó al flamenco, aunque tenía un vis cómica que logró explotar en los años 90, cuando había entrado ya en la madurez. Gracias al programa 'Genio y Figura', entró en las vidas de todos los españoles para no irse nunca. ¿Cómor?, Fistro, ¡Al ataquer!, ¿Te da cuén? o ¡No puedor! o 'Hasta luego Lucas', son solo algunas de sus frases más icónicas, que le dotaron de un estilo único e inconfundible.
Se hizo imprescindible, y cosechó tanto éxito que hasta hizo cine. Apareció en las películas 'Aquí llega Condemor, el pecador de la pradera', 'Brácula: Condemor', 'Papá Piquillo', 'Franky Banderas', 'El oro de Moscú', 'Spanish movie', 'La venganza de Ira Vamp' y 'Torrente 5: Operación Eurovegas'.