El entorno de Enrique Ponce y Ana Soria también se ha mostrado perplejo ante las informaciones que apuntan a una boda entre ellos que podría celebrarse en 2025. "No tengo ni idea", "Primera noticia", son algunas de las reacciones a las que ha tenido acceso el medio El Español. Su entorno más cercano de esta manera no ha dudado en negar que vayan a dar este paso en su relación.
Mientras, la protagonista de la noticia también había salido al paso negándolo y ostrándose muy enfadada por que se hable así de su vida personal cuando asegura que tan solo se están diciendo mentiras. La información compartida apuntaba a que tendrían planeado casarse en Almería en la primavera de 2025 y que los padres de ella están encantados, aunque lo que menos les gusta es que no pueda ser por la iglesia porque Enrique Ponce ya se casó de manera religiosa con Paloma Cuevas.
Que por el momento no se casen no quiere decir que no lo vayan a hacer más adelante. Lo cierto es que los dos habrían hablado en más de una ocasión de sus planes de boda, aunque sin concretar una fecha, y es por eso por lo que han surgido los rumores. Es un proyecto que les hace mucha ilusión y que pondría el broche de oro a su amor, pero de momento prefieren esperar.
Asimismo, el entorno ha comentado que no lo harán ni a corto ni a medio plazo. "Ya saben más que nosotros. Estamos pasando del tema porque es una con otra", llegó a decir ella, enfadada por lo que se ha hablado de sus planes con su pareja.
No habrá nulidad eclesiástica
En cuanto a cómo será la boda, está claro que cuando se celebre tiene que ser civil, porque Ponce tendría que solicitar la nulidad eclesiástica de su matrimonio con la empresaria Paloma Cuevas. Y no lo va a hacer y ni se lo ha planteado, tal y como han especificado a El español algunas persona cercanas. Hay una fuente que insiste en que se deje claro que Ponce no ha mostrado interés alguno en esa nulidad. Tampoco Paloma Cuevas, así que ninguno de los dos dará un paso al frente en ese sentido.