Carla Vigo, como muchas tantas personas, está conmocionada por la repentina muerte de Verónica Forqué, quien se quitó la vida en su domicilio de Madrid. La actriz ya había dicho en varias ocasiones que había tenido depresión y que lo había intentado varias veces, aunque siempre había conseguido encontrar la fuerza suficiente para salir adelante, pero en esta ocasión no ha podido ser.
La sobrina de la Reina perdió a su madre como ahora la ha perdido María Iborra, con la diferencia de que ella tan solo era una niña con seis años y tuvo que crecer con ello y aprender a vivir con una pérdida que cuesta comprender. Érika Ortiz, la hermana de la Reina Letizia, apareció muerta en el dormitorio de su casa de Vicálvaro, y fue su pareja, el cámara Alberto García, quien encontró su cuerpo su vida.
En esa ocasión todo apuntó allá por 2007 que lo tenía planeado, puesto que a pesar de que su hija pasaba mucho tiempo con su abuela Paloma Rocasolano, esa noche se quedó a dormir en casa de una vecina. Asimismo, dejó varias cartas, lo que reforzó la teoría de que lo tenía planeado. Ahora la joven ha preferido mantenerse al margen de la muerte de Forqué, sin dar su opinión a pesar de que muchos seguidores le hayan preguntado al respecto.
ha sido a través de su cuenta de Instagram donde ha dicho que esto le sobrepasa, y es que está claro que esto le trae muchos recuerdos doloroso s sobre la pérdida de su madre. "A raíz de lo de Verónica Forqué muchos me escribís tanto pidiendo consejo como para que os ayude a superar una depresión. De verdad me encantaría, pero no sé hacer eso. Así que ir a un especialista. Otros me habláis para decirme que de todo se sale, que es una opción, que siempre hay motivos para seguir luchando y cosas por el estilo. Os pediría por favor que estas cosas precisamente a mí no me las digáis porque me sobrepasan y me remueven demasiadas cosas ", ha dicho de manera clara.
Ha aprendido a vivir con ello
Lo cierto es que en otras ocasiones sí ha querido sincerarse sobre la muerte de su madre, como hizo en una entrevista con la revista Semana: "No se supera y menos de la forma que me pasó a mí. Aprendes a vivir con ello y se tarda mucho ", y recordó las distintas etapas a las que te tienes que enfrentar tras perder a alguien en estas circunstancias tan dolorosas: "Hay distintas etapas por las que vas a pasar. La primera, la negación. La segunda, la aceptación. Es la que más dura, porque te da un golpe de realidad y te das cuenta de que no la verás más. La tercera etapa es aprender a vivir con ello. Es la más fácil. Creo que, dependiendo de la relación que tengas con esa persona, lo superas o no".