Jaime Ostos ha confirmado que Marta González fue expulsada de la capilla ardiente del que fuera su suegro durante una década, del que se despidió a través de las redes sociales.
Con la muerte de Palomo Linares se ha abierto la caja de pandora, volviendo a retomar el tema de la nula relación que tenía el diestro con sus tres hijos, así como de una posible situación económica muy delicada. Ahora además Jaime Ostos ha confirmado la tensión vivida en la capilla ardiente. El compañero de profesión del fallecido ha acudido a 'La Mañana' de TVE y allí ha comentado que, efectivamente, Marta González fue vetada de la capilla ardiente por su ex Miguel Palomo Danko -que estuvo arropado por su actual pareja-, con el que estuvo seis años casada tras cuatro años de noviazgo.
"Se puso a llorar desconsoladamante y mi mujer le estuvo consolando", ha explicado Jaime Ostos al relatar que, cuando llegó a última hora de la tarde al tanatorio de La Paz de Alcobendas (Madrid), le dijeron que no podía pasar a darle su último adiós.
Marta González, 0 rencores
Un adiós que se produjo también a través de las redes sociales, donde colgó una foto del diestro de joven junto a un bonito mensaje en el que además aseguraba no guardar rencor a nadie: "Guardo todos los buenos recuerdos pasados en El Palomar junto a una familia que, durante diez años, también fue la mía, a la que quiero y con la que hoy comparto el dolor. Por encima de TODO, los recuerdos, lo vivido y lo aprendido, en mi corazón quedan".