Muy celosa de su vida privada, Miriam Giovanelli siempre ha compartido con sus seguidores de las redes sociales las cosas bonitas que le van pasando en la vida, pero sin entrar en demasiados detalles. No obstante, ahora, desde su casa durante el confinamiento, ha querido compartir algo muy bonito sobre su vida familiar.
A finales del mes de septiembre la intérprete anunció que estaba esperando su primer bebé. Una pequeña que llegó al mundo el 19 de noviembre. Entonces Giovanelli anunció que ella y su marido Xabi Ortega se habían convertido en padres de una niña a la que pusieron por nombre Renata. Ahora la actriz ha explicado qué significa ese nombre." Renata, cuando naciste nos pareció bastante guay que llevaras impreso en tu nombre la importancia de saber renacer. Tu primer nacimiento fue cosa mía (de nada), pero una vez en el mundo te tocaría a ti reinventarte una y otra vez y quisimos que tu nombre te sirviese de recordatorio cada vez que la vida te pusiera ante la tesitura de tener que recomponerte y volver a empezar. En el amor, la amistad y el trabajo. En tus pasiones y sueños ", ha escrito junto a una foto con la pequeña en brazos.
Un mensaje en el que también ha querido lanzar optimismo y fuerza para todo el mundo en esta situación tan complicada por la crisis del coronavirus: " Tómate el sufrimiento como un (breve y necesario) impulso para abrir horizonte y descubrir nuevos caminos, hija. Aquí estamos celebrando tu quinto mes, con más ganas que nunca de renacer. De que renazca el mundo entero. De que tengas la oportunidad y la salud para aprender a hacerlo tú también a lo largo de tu vida".
Asimismo, tampoco ha querido dejar pasar la oportunidad de pedirle a su hija que sea mucho más ordenada que ella con un toque de humor: " Tu padre @xabierortega_ me dice que no desaproveche la oportunidad y te pida desde el futuro que recojas tu cuarto. Por algo se preocupó en llenarte el armario de clasificadores que permiten la categorización jerárquica, el cromatismo ascendente y el diógenes descendente. Tu madre fue desordenada, pero puso un arquitecto en su vida (que cada uno juzgue a conveniencia). Feliz vida, Renata".