Tras no dar más información de lo que ocurre, 'El programa de Ana Rosa' informó el pasado martes 15 de mayo que la principal razón de la retirada de los escenarios de Kiko Rivera viene motivada por un pánico escénico que habría desarrollado estos últimos meses y que estaría pasando factura psicológica a la hora de afrontar una gira de conciertos durante todo el verano. Una información que contrasta con la que dieron en 'Cazamariposas', donde aseguraron que Kiko Rivera e Irene Rosales se habían trasladado hasta Barcelona para tratar de buscar una clínica donde fueran especialistas en los problemas que el cantante pueda tener.
Piden una tregua
La presión mediática a la que se enfrenta el clan Pantoja y, en especial, Kiko Rivera, está colmando la paciencia de sus familiares. Por eso, Irene Rosales, en una cuestionable maniobra, pedía a los medios una tregua para su marido, intentado dejar un tiempo para que se recupere y las aguas vuelvan a la calma. Aunque, sin duda, esto va a ser muy difícil de conseguir teniendo en cuenta el gran hermetismo con el que la familia está tratando el tema, ya que ellos mismos enviaron un parte médico a todos los ayuntamientos que habían contratado a Kiko para el verano adjuntando un documento en el que se advertía de que no se podían hacer públicas las causas de la cancelación del show.