Una belleza de Hollywood no se olvida fácilmente, y si además está en estado de buena esperanza, el interés por ella se multiplica. Es lo que le pasa, quiera o no, a Megan Fox, que ha vuelto a ser pillada por los paparazzi en pleno embarazo.
Discreción máxima
Aunque luce como nadie en los photocalls y se muestra desenvuelta durante las entrevistas, en realidad Megan Fox es una persona discreta y familiar. No en vano las imágenes que de ella captan los fotógrafos suelen ser aquellas en las que Fox aparece junto a su marido, el hijo de éste (fruto de otra pareja y con el que la actriz afirma llevarse muy bien). Casi imposible pillarla con su primogénito, Noah, que comparte con su marido. Como mucho se deja ver por la calle paseando con un aspecto casual.
Así, a la hora de capturar su embarazo los paparazzi no podían haberla encontrado de otra manera: vestida con un conjunto compuesto de vaqueros, camiseta, blusa y unas modernas gafas de sol. Sin embargo, nada es poco para la artista, que con un pintalabios rojo remató un look que la mostró tan bella como siempre.
En cuanto a trabajo, la actriz también triunfa: tiene pendiente el estreno en 2014 de la película 'Las tortugas ninja'. ¿Acudirá a la presentación con sus retoños?