La maternidad está plagada de momentos únicos e irrepetibles, pero también tiene sus cosas negativas. Las horas del día pasan demasiado rápido y las mamás no tienen tiempo para ellas mismas porque están volcadas en el bebé.
Un rostro de cansancio que, lejos de ocultarlo, lo luce con muchísimo orgullo. No es para menos, desde hace 12 días está cumpliendo su gran sueño de ser mamá: algo que consiguió al ver la carita de la pequeñaja Shaila.
Los días únicos de Tamara Gorro con su hija Shaila
Lo que todavía no han podido hacer es disfrutar todo lo que quisieran del recién estrenado padre Ezequiel Garay. El futbolista viajó a Estados Unidos únicamente para poder inscribir a la pequeña en el Registro, y rápidamente tuvo que regresar a Rusia para seguir con su trabajo en las filas del Zenit.