El hijo adoptivo del director de cine ha publicado en su blog personal un escrito en la que cuenta su versión de lo ocurrido en la hogar familia con sus otros hermanos.
La polémica está servida. Una vez que se han calmado las aguas en el caso de Woody Allen y los nuevos relatos que le acusaron de abusos a comienzos de 2018 motivados por el movimiento #MeToo y el caso de Harvey Weinstein; ahora uno de sus hijos adoptivos ha decidido hacer pública su versión sobre todo lo ocurrido durante la relación del director con Mia Fallow.
"Soy una persona privada y no me interesa en absoluto la atención pública. Pero dados los ataques increíblemente falsos y engañosos contra mi padre, Woody Allen, siento que no puedo permanecer en silencio mientras continúa siendo condenado por un crimen que no cometió", son las primeras palabras de esta carta abierta. Moses Farrow, un hombre que trabaja de terapeuta en el estado de Masachusetts, asegura que la única intención de sus palabras es la de mostrar el verdadero rostro de Mia Fallow y la falsedad de la imagen de familia feliz y unida que pretendía vender a los medios.La actriz adoptó al pequeño en Corea del Sur en 1980, una década antes de la que Allen apareciese en sus vidas. Farrow hijo asegura que fue una gran alegría para él cuando fue también adoptado por él. Las cosas empezaron a complicarse cuando el director de cine inició una relación amorosa con Soon-Yi Previn, otra hija adoptiva de la actriz, casándose en 1997: "Era importante para mi madre proyectar al mundo una imagen de una familia feliz mezclada de niños biológicos y adoptivos, pero esta bastante lejos de la realidad", y sentenció: "Estoy seguro de que mi madre tenía buenas intenciones al adoptar niños con discapacidades incluso en extremas circunstancias, pero la realidad dentro de nuestras paredes era muy diferente".
Moses Farrow ha querido también relatar varios supuestos casos de agresión de los que fue testigo: "Me duele recordar momentos en los que vi a mis hermanos, algunos ciegos o discapacitados físicos, ser arrastrados por las escaleras para acabar encerrados en un dormitorio o incluso un armario. Incluso cerró a mi hermano Thaddeus, parapléjico de poliomelitis, en un cobertizo al aire libre durante toda la noche como castigo por una cosa de niños". Pero esto no se quedó aquí. En una ocasión Farrow madre "arrojó una gran pieza de vajilla de porcelana a la cabeza de Previn y luego la golpeó con un teléfono". El propio protagonista de la historia también ha sido víctima de los ataques físicos de su madre: "Me abofeteó, me empujó hacia atrás y me golpeó en el pecho" justo antes de llamarle "mentiroso patológico". Woody Allen no fue culpado
Hace años el director de cine fue acusado por Dylan Farrow alegando que había abusado de ella en 1992, cuando tenía tan solo 7 años. Allen fue investigado por ello pero finalmente no fue declarado culpable. Esto no hizo que las acusaciones hacía él siguiesen apareciendo a lo largo de los años en distintas publicaciones: "La familia Farrow está usando cínicamente la oportunidad que brinda el movimiento Time's Up para repetir esta acusación desacreditada", llegó a asegurar el propio cineasta en algunas entrevistas: "Nunca molesté a mi hija, ya todas las investigaciones concluyeron hace tiempo". Tras la publicación de la carta abierta de Moses Farrow, su hermana Dylan Farrow le ha respondido a través de Twitter: "Como dije la última vez que hice estas afirmaciones, este es un intento de desviarse de una acusación creíble hecha por una mujer adulta, al tratar de impugnar a mi madre, que solo nos ha apoyado a mí y a mis hermanos", y añadió: "Mi hermano es una persona con problemas. Lamento mucho que esté haciendo esto".