Fue el 1 de septiembre de 2024 cuando nacieron las mellizas de Marta Pombo, y por fin la familia al completo se encuentra en casa. La influencer y su marido, Luis Zamalloa, han pasado unos días delicados porque una de las niñas, Candela, tuvo que quedarse en la UCI por los problemas respiratorios que presentó tras su nacimiento. Tras haber cumplido con los días de antibiótico establecidos ha podido recibir el alta para reunirse con su hermanita y disfrutar de esta nueva etapa siendo cinco en casa.
La influencer ha compartido varias reflexiones en su cuenta de Instagram, contando que este agotamiento por no parar le hace muy feliz. "Cosas del estrés y posparto: cara amarilla, traslucida, ojos hinchados, granos... Pero la tranquilidad de estar aquí todos en casa... Me da igual, que venga lo que tenga que venir. Estos días de hospital no tenía ganas ni de hacerme mi rutina facial, que me flipa. Estaba seca como una pasa porque no me apetecían ni cremas ni nada ", ha explicado.
También ha querido enseñar cómo ha cambiado su cuerpo en pocos días, porque ha tenido una recuperación muy rápida de este segundo parto gemelar. "Esto me parece un milagro. A diez días de haber dado a luz, estar así... Mi tripa era dimensiones enormes", decía, enseñando que se puede poner ya su ropa de antes del embarazo y que apenas tiene tripa 10 días después de haber dado a luz. " Esto no es lo normal. No lo toméis como referencia... no quiero que nadie se compare, cada cuerpo trabaja de una manera y con sus ritmos ", seguía diciendo.
Respecto a esta cambio tan evidente, la empresaria cree que el ingreso de una de sus hijas ha tenido que ver. "Yo creo que el estrés de la última semana ha hecho algo en mi metabolismo. Con Matilda no me recuperé tan bien, creo que el estrés vivido esta semana ha hecho que el cuerpo funcione diferente ", ha contado. "Siento que estos días de hospital han hecho que no me dé tiempo a pensar a regocijarme en me duele todo he tenido que espabilar muy rápido y eso me ha venido muy bien a sentirme bien rápido", ha añadido, contando además que en este posparto ha estado usando faja: "Lo estoy notando muchísimo".
Eso sí, echa de menos también su barriguita de embarazada: " Intento no pensar en ello porque me pongo a llorar. Echo muchísimo de menos mi tripa, cómo me miraba la gente de bonito al ver esta majestuosidad, lo guapa que me sentía, éramos una. Estos días intento no ver muchas fotos mías embarazada porque me pongo a llorar de la misma. Menos mal que todo pasa".
Mucho ejercicio durante el embarazo
Previa a esta imagen en la que se puede apreciar lo recuperada que está, ha enseñado otra a los pocos días de dar a luz, donde aún tenía una barriga incómoda y flácida, lo más normal del mundo. Por otro lado, ha comentado que haberse mantenido activa durante su embarazo ha tenido mucho que ver en esta recuperación, así que se siente agradecida por haberse esforzado, porque ahora su cuerpo lo ha exteriorizado de esta manera.