La influencer está muy feliz después de haber ampliado la familia, pero también preocupada porque una de sus hijas está en la incubadora.
Después de que Luis Zamalloa, marido de Marta Pombo, anunciara a través de sus redes sociales que sus mellizas ya habían nacido y que estaban tanto ellas como la mamá bien, ahora ha sido la influencer la que ha traído nueva información al respecto, compartiendo una primera foto de una de sus hijas, en concreto su manita, y escribiendo unas palabras sobre cómo están y cómo ha ido el parto.
"Ayer nacieron María y Candela, fue un parto de cuento de hadas. María nació con 2.200 kg y Candela con 2.400 kg. Hemos pasado la noche solo con María y nuestra Candelita en la UCI, ya que no estaba consiguiendo respirar bien ella solita al ser prematura", ha comentado. Pese a que haya sido tan pequeña, no ha mostrado mucha preocupación porque espera poder tener a su hija pronto con ella. En su texto ha añadido: "Sigue en la incubadora pero muy bien. No necesita oxígeno, hace varias tomas bien y tolera bien la leche. Esta tarde vuelve con nosotros". Fue ella misma la que compartió un vídeo diciendo que había roto aguas en la semana 36 de gestación -sin llegar a la 40- y que se habían marchado al hospital después de despedirse de su hija Matilda, que en octubre de 2024 hará dos añitos. Su marido, Zamalloa, estaba muy feliz por el día en el que se había puesto de parto, ya que el 1 de septiembre le parecía una buena fecha para nacer.
Al cabo de las horas fue él el que trajo más información, pero a su mujer se la podía escuchar de fondo diciendo que estaba muy feliz. El matrimonio en muy poco tiempo ha formado una familia numerosa y celebrarán su primer aniversario de boda siendo ya una familia de cinco. Lo que se le venía encima
Mientras tanto, Marta Pombo había hecho saber que se estaba mentalizando de lo que se le venía encima, sin saber cómo iba a salir el parto y viviendo todo con mucha incertidumbre. "Cada vez que pienso en lo que se me viene me dan unas ganas de coger aire... me entran la incertidumbre y la angustia por saber cómo va a ser. Estoy acojonada con lo que se viene. Todo el mundo me dice que va a ser maravilloso, disfruta, es precioso lo que estás viviendo. Pero el no saber con exactitud cómo van a ser las cosas me genera intranquilidad", decía, haciendo alusión a lo que supone tener un parto gemelar.