Lo primero a lo que ha querido hacer alusión la modelo ha sido a todas las críticas que ha recibido por irse de vacaciones con su pareja pocas horas después de que este recibiese el alta tras dos semanas ingresando en el hospital: "En redes sociales me llaman egoísta por dejar que Kiko se vaya de vacaciones", señala los comentarios que le echan en cara que ha obligado a su pareja a viajar como un capricho suyo: "Como si él no fuera mayor para tomar sus propias decisiones".
Para la joven tampoco están siendo unas vacaciones sencillas ya que tiene que ejercer 24/7 de enfermera de Kiko Matamoros, todavía en proceso de recuperación tas las infecciones que ha tenido: "El vuelo fue un poco duro, cansado. Él estaba muy débil, no podía mantenerse mucho tiempo en pie. Está tomando antibióticos muy fuertes y había estado 20 días tumbado", confiesa. "Kiko tenía la bolsa del drenaje colgando en el avión y le estuvo limpiando el catéter".
La joven se preparó durante los días en el hospital para ser la perfecta cuidadora de su novio por lo que pudiese ocurrir. "Le hago las curas", asegura: "Aquí, en México, hace un par de días se le salió un poco el catéter de la herida y se lo tuve que reintroducir yo. Son complicaciones menores". Ante la preocupación por el estado de salud del colaborador, Marta López asegura que siguen en contacto con los médicos de Matamoros, quienes están haciendo un seguimiento de su evolución: "Kiko es admirable".
"Al principio no había problemas, pero luego todo se torció"
Sin duda uno de los mayores quebraderos de cabeza de la modelo es la guerra mediática que Anita Matamoros -respaldada por su madre, Makoke- ha abierto contra ella sin piedad tras haberla vetado en varios establecimientos de Madrid en los que había coincidido. "Al principio no había problemas, pero todo se torció", asegura. Marta López ha querido también salir en defensa de su pareja, muy atacado por ir en contra de su propia hija: "Kiko no ha arremetido contra Ana, lo único que ha hecho es defenderme, quiere educar a su hija bien y no consentir actitudes irrespetuosas".
Unos hechos que no han hecho más que unir a la pareja ante las adversidades. Kiko Matamoros y Marta López están mejor que nunca y más enamorados cada día. La cosa parece ir tan bien que incluso están ya pensando en planes de boda. O al menos la modelo ya se ve vestida de blanco de camino al altar: "Nos apetece casarnos", confiesa: "Soy muy clásica, de ir de blanco y de que me lo pidan a mí". ¿Volverá entonces de México como la prometida de Kiko Matamoros?