Marta López Alamo ha hablado abiertamente en sus redes sociales de cómo superó su TCA (trastorno de la conducta alimentaria) y cómo vivió ese proceso hasta lograr olvidarse para siempre de la talla para comenzar a ser feliz y tener las riendas de su vida. La mujer de Kiko Matamoros ha hablado desde su propia experiencia sobre cómo lo ha conseguido, aunque ha sido un largo y arduo camino para ella.
Kiko Matamoros y Marta López Álamo en el funeral de la madre de Joaquín TorresLa modelo ha hablado de este aspecto de su vida después de haber contestado a una ronda de preguntas de sus seguidores, y una de ellas ha sido si después de superar su TCA ha sentido más inflamación. Muy sincera y natural, no ha dudado en contestar a esta cuestión, diciendo: "Estaba tan ocupada volviendo a vivir que yo sé precisamente que superé en su momento el TCA porque no volvía a preocuparme por las calorías, por el peso y por la talla nunca más ".
Lo cierto es que ha contado que ha sido un proceso de años, porque ha añadido: " Sí que vi que desde que lo superé en 2016 o así, hasta 2019 o 2020, tardé como tres años en volver como a mi cuerpo normal". Lo peor de este tipo de trastornos no es que afecten a los hábitos alimenticios, sino que hacen mucha mella en las emociones de la persona que lo padece, ya que puede sentir presión, baja autoestima o incluso depresión.
Kiko Matamoros y Marta López Álamo, muy cariñosos en la presentación de 'Machos Alfa 2'En cuanto a cómo está en este punto de su vida, ha añadido: "Ahora, de hecho, me cuesta muchísimo coger peso, es algo que yo siempre, mis amigos lo saben, no busco para nada adelgazar, al contrario, tampoco coger peso pero sí que coger músculo, coger algo de grasa, con el tiroides, por lo que sea, me cuesta muchísimo coger peso y me obligo a comer muchas veces que no tengo hambre".
Lo tiene más que superado
La mujer del colaborador de televisión ha terminado diciendo: " La gente dirá 'si no tengo hambre, pues no como' yo, como no coma, hasta luego. Intento comer mucho, mucho hidrato... pero no, no me noté muy inflamada tampoco. Lo que noté es que después de superarlo cogí 20 kilos de golpe, simplemente porque empecé a comer y llevaba cuatro años sin comer, o cinco, entonces algo aumentas. Pero no lo pasaba mal, al contrario, lo pasaba bien porque volví a disfrutar y lo que menos me preocupaba era la talla ". Ahora se encuentra en un buen momento de su vida y no tiene ningún tipo de inconveniente a la hora de hablar de cómo se enfrentó a esta cruda realidad para mejorar su vida y su salud.
